La Terremoto de Alcorcón, Penélope Cruz y Leonor Watling: 15 años de una foto memorable
Pepa Charro ha abierto el baúl de los recuerdos y ha publicado una foto en su Instagram que cuenta la loca historia de una fiesta de chicas Almodóvar
Pongámonos en situación, finales de los 90 e inicios de los años 2000, los jóvenes salen a disfrutar del placer de la noche, de las calles, rompen sus cadenas y quieren ver amanecer. La música y el cine se convierten en movimientos que expresan la voz e identidad de esta nueva sociedad, que creía tener un futuro perdido.
Los más revolucionarios y afortunados acaban convirtiéndose en estrellas; entre las más destacadas, un grupo de intérpretes que responden al apodo de ‘chicas Almodóvar’. Estas se lanzan a conquistar las calles de la capital, y así nos lo ha querido mostrar La Terremoto de Alcorcón en su última publicación de Instagram, en la que se encuentra con unas jovencísimas Penélope Cruz y Leonor Watling, a las que confiesa haber peinado y maquillado para la ocasión.
“Una noche cualquiera, aquí con mi pandi… Recuerdo que esa noche las maquillé y peiné a todas… Igual al flequi de Leonor podía haberle dado un acabado más lineal, pero ya sabéis, estaba en esos días”, confiesa en su publicación la cómica. Pero no se le dio nada mal hacer de estilista porque podemos reconocer a la perfección la esencia de ambas actrices.
La atención de la foto, sin lugar a duda, recae sobre Pepa, conocida por su estilo drag, exagerado y recargado. Sin embargo, lo curioso es que esta consiguiese potenciar la naturalidad tan característica del aspecto de Penélope gracias a un maquillaje sencillo y un recogido, y plasmase esa estética rompedora y un tanto punk de Leonor, con un maquillaje inocente protagonizado por el colorete. Aunque la cantante critique el resultado de su corte de flequillo a la actriz, el resultado analizado en la actualidad podría evocar a un mullet de lo más atractivo.
Una pregunta que todo el mundo se está haciendo es ¿de dónde nace este grupo de amigas? ¿Por qué estaban de fiesta juntas? Todas son madrileñas y nacidas a mediados de los años 70, ese es el primer lazo de unión entre nuestras tres protagonistas. Las tres se dedicaban a la interpretación y pese a su juventud estaban marcando un antes y un después en nuestro país, con un respaldo común: Pedro Almodóvar.
Tanto Leonor Watling como Penélope Cruz comenzaron en el mundo de la actuación siendo niñas adolescentes y se afianzaron en el panorama nacional en la segunda mitad de los años 90; es más, ambas llegaron a competir por un Goya a mejor actriz protagonista en 1998, que acabó ganando la de Alcobendas.
Las dos vivieron uno de sus mayores éxitos de la mano del director manchego, en el caso de Leonor como protagonista de ‘Hable con ella’ y Penélope con ‘Volver’, película por la que se convirtió en la primera actriz española candidata a los Oscar y a los Globos de Oro como mejor actriz protagonista.
La Terremoto se encontraba en un plano bastante diferente al de sus dos amigas. Pepa se hizo conocida en España a finales de los 90 por sus parodias de canciones como ‘Hung Up’ de Madonna, más conocida como ‘Time goes by con Loli’. Su humor la acabó llevando a acompañar en 2004 a Pedro Almodóvar al Festival de Cannes en la presentación de ‘La mala educación’, y en Madrid en la de ‘Volver’. ¿Sería en este evento dónde se conocieron las tres?
Fuera como fuese, todas residen bajo el paraguas de haber sido una ‘chica almodovar’ y se encargaron a la perfección de cubrir este papel porque como cuenta Elvira Lindo en 'El País': “Para las chicas Almodóvar su hábitat natural era el urbano; la calle y los bares, su hogar. Habían dejado atrás la estética progre para abrazar un estilo punky, pop o retro. Las chicas Almodóvar eran temerarias, apasionadas, tozudas, irreflexivas, algo salvajes. Las mujeres de Pedro Almodóvar fueron cambiando con el curso de los años, se aguaparon, se sofisticaron, pero aun así siguieron preservando algunos aspectos que siempre las definirán: coraje, sinceridad, ingenuidad y astucia a partes iguales”. Una descripción perfecta para sintetizar todo lo que nos transmite esta imagen.
¿Cuántas anécdotas y fiestas tendrían lugar a finales de los 90 e inicios de los 2000 en la mítica sala Morocoo, en el Pasapoga o en la Discoteca Capricho y desconocemos? Ojalá Madrid tuviese boca y no solo ojos. Damos las gracias a Pepa Charro por permitirnos acceder a una parte de nuestra historia y deseamos que todos nuestros famosos se animen a hacernos estos regalos del pasado.
Pongámonos en situación, finales de los 90 e inicios de los años 2000, los jóvenes salen a disfrutar del placer de la noche, de las calles, rompen sus cadenas y quieren ver amanecer. La música y el cine se convierten en movimientos que expresan la voz e identidad de esta nueva sociedad, que creía tener un futuro perdido.
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