La ruta asturiana que hizo sudar (y pasar miedo) a Cristina Pedroche y la deliciosa comilona de después

Una de las mejores maneras de escapar de la ola de calor que sacude gran parte de España estos días es poner rumbo al norte, donde la temperatura no pasa nunca de los 30 grados y se puede dormir tapado por las noches. Y eso es precisamente lo que han hecho Cristina Pedroche y David Muñoz, que tras unos días de escapada en Galicia, llegaban al Principado de Asturias dispuestos a disfrutar de sus paisajes y de su gastronomía.

Deportistas ellos, decidieron animarse a recorrer una de las rutas más populares de la región, la que llega al Pico Pienzu, la cima donde el mar da paso a la montaña. Pero su aventura no estuvo exenta de dificultades, que la presentadora y el cocinero no dudaron en compartir con sus seguidores a través de sus stories de Instagram.

El Pico Pienzu, que divide los concejos de Parres y Colunga, es la elevación principal de la Sierra del Sueve, una imponente cadena montañosa que se extiende frente al litoral astur. La ruta hasta este pico se suele comenzar en el Mirador del Fitu, uno de los principales atractivos turísticos de la región, que comienza con un paseo de dos kilómetros llanos por pastos de montaña, en los que caminando entre vacas hay vistas a la costa por un lado y a los Picos de Europa por el otro.

Pero como pudo comprobar la vallecana, las cosas no tardaron en ponerse difíciles. "Esto es absolutamente precioso, pero me está costando bastante, todo es cuesta arriba". De mal en peor, la ruta se volvió aún más complicada cuando llegó el momento de descender.

"Cuando estás contenta porque ya has subido, pero te das cuenta de que tienes que bajar", era el título con el que Cristina Pedroche ilustraba en su muro de Instagram ese momento, invitando a sus fans a contemplar su cara de miedo.

Su marido trataba de animarla en un vídeo en el que la llamaba "Pedroche Tocha" y escribía: "Seguimos subiendo, hora y media llevamos. Va muy feliz, piensa que ya casi lo tenemos, pero falta una hora con mucha pendiente y todavía no se ha dado cuenta".

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La aludida, no muy convencida, le respondía digitalmente: "lo peor de todo es bajar, tengo un miedo horrible. Pedroche tocha no, Pedroche cagona hoy".

Pero al final su esfuerzo tuvo recompensa con una espléndida comilona en uno de los restaurantes más prestigiosos de Asturias: Casa Marcial. La presentadora no dudó en compartir con lujo de detalles el menú que degustaron en el establecimiento que Esther y Nacho Manzano poseen en Arriondas.

El matrimonio, como no podía ser de otro modo, continúa así la odisea gastronómica que comenzaran en Galicia visitando el restaurante Culler de Pau en O Grove. "Qué bien se come cuando se come bien. Poesía, buena cocina, inteligencia y sabor", escribía la madrileña sobre su experiencia allí.