Siete habitaciones, ocho baños... Las gemelas Iglesias nos 'cuelan' en su mansión marbellí

Victoria y Cristina Iglesias han fijado en la casa de su padre Julio Iglesias en Marbella, Las Cuatro Lunas, su base de operaciones la mayor parte del tiempo. La piscina infinita, los caballos y sus amplias estancias han convertido a este imponente enclave en la Costa del Sol en el favorito de las gemelas del cantante, que durante todo el año realizan largas estancias en sus instalaciones. Sobre todo, en verano.

Adictas a las redes sociales, como cualquier chica de su edad, nos han colado entre pose y pose en los rincones más desconocidos de las mansiones que su padre tiene a lo largo y ancho del mundo y, por supuesto, esta no iba a ser menos.

Instaladas allí desde hace semanas, las hijas de Miranda Rijnsburger disfrutan del sol, el calor y planes con amigas casi todo el tiempo intramuros de la casa. ¿Para qué salir si disponen de todos los lujos y privacidad sin moverse de allí?

Su refugio en Marbella

El refugio que Julio Iglesias tiene desde hace décadas en Marbella es, sin duda, uno de sus rincones más secretos. Con más de 450 hectáreas y un edificio principal con siete habitaciones, ocho baños, cinco para el servicio, una piscina con dos baños y un estudio de grabación, Las Cuatro Lunas, nombre que recibe la finca, es uno de los sitios preferidos de las hermanas.

Según nos han relatado en numerosas ocasiones personas de su entorno, para las gemelas, esta finca es “su casa”, a pesar de vivir prácticamente todo el año junto a sus padres y hermanos en Miami.

Aunque se puso a la venta hace años, lo cierto es que el cantante y su familia aún hoy disfrutan de los encantos de esta propiedad ubicada a tan solo 10 minutos en coche de Puerto Banús.

Allí las hemos visto posar en bikini al borde de la piscina de borde infinito, jugar con sus dos perros en sus impresionantes jardines, hoy perfectamente recuperados del incendio que sufrió la finca en 2010, y utilizar los muebles en escenarios ideales para estudiadas sesiones de fotos con destino a sus redes sociales donde acumulan miles de fieles seguidores.

Tras su debut en la gala del MET, con aquellos vestidos de plumas idénticos, uno en rosa y otro en azul con el que sorprendieron a propios y extraños, las gemelas se han convertido en dos de los rostros más seguidos del panorama marbellí. Por tanto, no es de extrañar que sus redes se hayan convertido en el mejor reclamo para presumir de vidas idílicas. Sobre todo ahora, cuando están a punto de estrenarse como empresarias con el lanzamiento de su empresa de suplementos alimenticios.

Sus rincones favoritos

Donde aún no las hemos visto posar es en la capilla que su padre mandó construir para casarse con su madre ni en el huerto recogiendo las verduras que componen los menús del día a día de la familia.

Sí que lo han hecho en los establos, uno de sus rincones predilectos. Como otras grandes herederas, son apasionadas de la hípica, en concreto del salto, como Carlota Casiraghi, Marta Ortega o Jennifer Gates.

Juntas salen a dar largos paseos cuando cae el sol y durante el día, visitan las cuadras para cuidar de sus animales. Para las gemelas, tantos sus perros como sus caballos forman parte fundamental de sus vidas.

Sus perros viajan siempre con ellas de una punta a otra del mundo en el jet privado del artista e incluso disponen de cuentas en redes sociales donde las hermanas comparten las aventuras de sus mascotas como tantas otras vips.

Una vida de ensueño la de los hijos del cantante que ahora conocemos mejor gracias a Cristina y Victoria.