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Óscar Higares: polifacético torero, 'superviviente' y con familia numerosa
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Óscar Higares: polifacético torero, 'superviviente' y con familia numerosa

A sus 50 años recién cumplidos, el madrileño ha sabido reciclarse tras dejar el mundo taurino de una forma ejemplar probando suerte como modelo y actor

Foto: Óscar Higares en una foto de archivo. (Getty)
Óscar Higares en una foto de archivo. (Getty)

Fue durante una novillada nocturna que se celebró en Madrid y en la que toreaba un torero que apoderaba un tío suyo, cuando este diestro de esbelta figura agitanada –al menos así lo describe su entrada en la Wikipedia– se enamoró de los ruedos. Tras una carrera que arrancaba en 1992 en Las Ventas, ahora Óscar Higares es feliz tras cortarse la coleta, dedicado a mil y una actividades que poco o nada tienen que ver con su antigua profesión.

Por eso quizá, aplaudía recientemente la decisión de su amigo Enrique Ponce de abandonar temporalmente el toreo, algo que calificaba de "fantástico". Desde luego a él la jubilación del traje de luces hace ya diez años le está sentando de maravilla.

Polifacético y todoterreno donde los haya, Higares alcanzaba el medio siglo de vida hace unas semanas, pero eso no le ha mermado sus ganas de seguir probando cosas nuevas.

"Soy un tío con muchas ganas de aprender, muy inquieto, muy de probar cosas nuevas, por eso la gente se sorprende cuando descubre algunas facetas mías, algunas tan insospechadas como que me gusta coser. De ahí que les llamara la atención cuando me vieron en 'Maestros de la costura', porque para mí coser es normal", confesaba en una entrevista para 'Diez minutos', donde añadía que ha heredado la afición por la costura de su madre.

El reality de TVE es solo uno de tantos por los que el madrileño ha paseado sus imponentes hechuras. Su carrera televisiva arrancaba en 2006 cuando participó en el programa presentado por Florentino Fernández 'El club de Flo', recitando un monólogo humorístico con el que además se impuso al resto de famosos concursantes.

Desde entonces ha aparecido en series como 'Bandolera' o 'Victor Ros', películas como 'Si yo fuera rico' y en otros realities como 'MasterChef celebrity' o 'Supervivientes', una experiencia que según él, le cambió la vida.

"Estoy triste, mucho, porque mi ilusión era estar aquí hasta el final. Seguir disfrutando de esta experiencia fantástica. Creo que he sido un caballero y he sido generoso", explicaba tras su expulsión, antes de anunciar que "lo primero que voy a hacer será comer, ducharme y soñar con llegar y ver a mi mujer y mis niñas".

Porque para Óscar su familia es su vida. Lleva tres décadas casado con Sandra Álvarez, con la que tiene tres hijas, India, Martina y Chloe, de las que como buen padre orgulloso, presume a menudo en su cuenta de Instagram.

Se da la circunstancia además de que la cuñada de Óscar es la actriz Ana Álvarez con la que, para rizar el rizo, acaba de compartir protagonismo en el plató de 'Pasapalabra'.

Foto: Enrique Ponce y Ana Soria durante un paseo en pareja. (Instagram @enriqueponce)

Sobre cómo conoció a su compañera de vida, en la entrevista antes mencionada contaba la curiosa historia de su primer encuentro. "Yo fui a Ronda a ver a Francisco Rivera, el día de su debut. Al llegar todos los hoteles estaban ocupados y uno de los que venía con nosotros, se acordó de que una amiga suya vivía en Estepona. La llamó y allí nos fuimos a dormir. La chica era Sandra, que estaba con sus hermanas, Ana y Miriam, tres bellezones".

Precisamente en el espacio de Fran Rivera en 'Espejo público', desvelaba otra divertida anécdota familiar cuando le confesaba quién estaba detrás de las sugerentes fotos semidesnudo que publica a veces en sus redes sociales. "Vamos a la playa y le digo a mi madre que me tire una fotito que voy a calentar Instagram", reconocía con humor.

Con su madre, Estrella, posaba en esa red social hace unos días para festejar un entrañable cumpleaños conjunto: él por sus 50 y ella por los 70. "Hoy soplamos las velas juntos, te quiero", le decía lleno de amor su hijo.

Fue durante una novillada nocturna que se celebró en Madrid y en la que toreaba un torero que apoderaba un tío suyo, cuando este diestro de esbelta figura agitanada –al menos así lo describe su entrada en la Wikipedia– se enamoró de los ruedos. Tras una carrera que arrancaba en 1992 en Las Ventas, ahora Óscar Higares es feliz tras cortarse la coleta, dedicado a mil y una actividades que poco o nada tienen que ver con su antigua profesión.

MasterChef Celebrity Francisco Rivera
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