Inés Domecq arrasa con su marca: facturación al alza y cada día más clientas vips

IQ Collection, la marca que creó en marzo de 2020 Inés Domecq, ha sido una de las revelaciones de las grandes fiestas y eventos varios de la pandemia. Y eso que no pudo nacer en un momento más complicado.

Creada junto a su íntima amiga y socia en este proyecto, Virginia Pozo (fundadora de Coosy y Coosy White, la línea de novias), su crecimiento desde el lanzamiento de su primera colección ha sido imparable.

En su primer ejercicio, han presentado unas cuentas en las que las ventas superan los 200.000 euros, según los documentos a los que ha tenido acceso Vanitatis. Unas cifras que suenan mejor aún teniendo en cuenta el terrible momento que atraviesa el sector textil y, más en concreto, el dedicado a bodas, bautizos y comuniones, uno de lo más castigados por la pandemia.

Los datos son positivos. La rentabilidad económica en el ejercicio 2020 alcanzó un nivel positivo de casi un 60% y la financiera por encima de 113%. Una estructura alabada por los expertos que, sumada al expertise de las dos socias fundadoras de IQ, no ofrece dudas sobre la futura solvencia de la empresa.

Con un objeto social dedicado al “diseño, confección, adquisición, importación, exportación y comercialización al por mayor y al por menor de todo tipo de prendas de vestir, complementos de moda y productos decorativos”, todo parece apuntar a que nos encontramos muy al principio del proyecto que estas dos mujeres pretenden llegar a construir.

“Estamos encantadas con el apoyo recibido y la aceptación de nuestros diseños. Seguimos trabajando muy duro y con la misma ilusion que el primer dia”, asegura Virginia Pozo, cofundadora de la marca. “Estamos a las puertas del lanzamiento en octubre de la nueva colección. Esperamos que a nuestras clientas les guste tanto como a nosotras y se sientan identificadas con el concepto IQ”.

Los armarios más vips

Por lo pronto, el sector de los grandes eventos BBC (bodas, bautizos y comuniones) se ha convertido en su principal fuente de venta. Sus diseños originales, con un sello de identidad que grita a los cuatro vientos quién está detrás y unas tiradas lo suficientemente cortas para animar aún más a la compra antes de que se agoten, no hay evento en el que no hayamos visto en lo que va de año a alguien vestido de ellas.

La reina Letizia asistió a la última inauguración de Fitur en Ifema con uno de sus monos; Sofía Palazuelo, la duquesa de Huéscar y una de las mujeres más alabadas desde el punto de vista estilístico, no solo ha vestido prendas suyas en el día a día, sino que eligió un diseño de IQ Collection para el bautizo de su primogénita, Rosario, futura duquesa de Alba. A ese bautizo, Tana Rivera también asistió vestida con un look de la marca.

También bautizó a su hija vestida por Inés Domecq la influencer María García de Jaime durante un evento que reunió a la aristocracia de Instagram (de María Pombo a Victoria de Marichalar). Y no son las únicas.

Andrea Pascual, nuera de la infanta Pilar, ha elegido looks de la firma para varios eventos. Isabelle Junot, futura marquesa de Cubas, lució hace unos días un vestido con su nombre en la boda de Carlos Cortina, y la actriz Paz Vega deslumbró en su desembarco en el Festival de Málaga con otro de sus diseños.

Inés, la mejor embajadora de su marca

No hay duda de que la marquesa consorte de Almenara ha encontrado la fórmula perfecta para agotar todo lo que pone a la venta, conseguir colarse en algunos de los armarios más vips de la alta sociedad y crear auténticos objetos de deseo.

Y es que parte de su estrategia emana de la inspiración que durante años han sugerido sus looks. Invitada perfecta allá donde iba, vestirse como Inés Domecq es sinónimo de éxito, y eso su público lo sabe.

Por ello, en varias ocasiones ha lucido diseños que aún no estaban a la venta para generar aún más expectación de cara a futuros lanzamientos. Lo hizo durante la boda de Carlos Fitz-James Stuart y Solís y Belén Corsini, actuales condes de Osorno, en el palacio de Liria el pasado mes de mayo, y lo volvió a hacer hace apenas unos días durante la boda de su primo Santiago Benjumea en Madrid con la diseñadora Lucía Martín Alcalde.

Dos looks diferentes que, en el caso del primero, el único que ha salido a la venta por el momento (el segundo formará parte de la colección que lanzarán en unas semanas), agotó en pocas horas e incluso tuvo que ofrecerlo en otros colores para atender la demanda.

No es esta la primera aventura como empresaria de moda de Inés Domecq. Hace años montó con su amiga Laura Vecino, duquesa consorte de Feria, la marca de ropa de baño Bqueenie. Una firma que deshicieron hace apenas dos años y que dio el pistoletazo de salida al éxito de hoy.

En aquel entonces, comenzó a diseñar colecciones más cortas en colaboración con Coosy. Se vendían en sus tiendas y su página web poniendo semilla de lo que apenas dos años más tarde sería IQ Collection.