Un respiro para Ana Obregón: "Gracias papá por regalarnos más tiempo"

El corazón de Ana Obregón ha vuelto a estar en un puño en los últimos días. Su padre, Antonio García, había sido ingresado en el hospital a sus 95 años de edad, en una clínica madrileña.

La avanzada edad del progenitor de la actriz y presentadora, sumada a las tristezas que han golpeado a la familia en los últimos tiempos, con las recientes muertes de Ana María Obregón, esposa de Antonio y madre de Ana, así como la de Álex Lequio, hicieron temer lo peor.

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J. Díaz

Afortunadamente, Antonio García ha podido recuperarse de este contratiempo y ha recibido el alta hospitalaria. La propia Ana ha dado la feliz noticia a través de sus redes sociales. "Después de muchos días luchando en el hospital como un campeón ya estás en casita. Gracias papá por regalarnos más tiempo", ha comenzado diciendo en una bonita carta dedicada a su padre. Ana, consciente de que su dolor es compartido también por su padre, ha querido animarle, asegurándole que intentará que recupere la sonrisa en este tiempo que le queda de vida: "Da igual que sean días, meses, años … intentaré que volvamos a sonreír, y sobre todo a decirte muchas veces que te quiero para que nunca se te olvide”.

La actriz tampoco ha querido dejar pasar la oportunidad de agradecer todas las muestras de cariño recibidas. Asegura que son un bálsamo para ella: "Gracias inmensas de todo corazón por vuestros miles de mensajes de cariño y apoyo. No creáis que no los leo, los leo TODOS , y cada uno es como una caricia que necesita mi alma", ha confesado.

Ana ha acompañado el texto con una preciosa y antigua fotografía en blanco y negro en la que aparece abrazada a su padre.

Fue a finales de septiembre cuando se dispararon todas las alarmas. “Papá, estás luchando positivamente en ese hospital como el campeón que has sido toda la vida. Un campeón de 95 años. Soy muy egoísta. Entiendo que quieras reunirte con mamá pero, por favor, quiero volver a sonreír contigo… un poco más”, escribía Ana Obregón en un desgarrador texto con el que mostraba su temor por volver a perder a un ser tan querido cuando aún no se ha recuperado del golpe por el fallecimiento de su madre y su hijo.

Para Ana, sus padres y sus hermanas han sido un gran apoyo durante todo este tiempo en el que ha tenido que aprender a vivir con la ausencia de Álex. Siempre con su hijo en el recuerdo, mantuvo un largo encierro, masticando su dolor y viviendo el luto en la intimidad. Poco a poco comenzó a retomar proyectos televisivos. Emocionada la vimos dando las campanadas en TVE, como siempre desde que no está, con Álex en el recuerdo.

Durante todo ese tiempo su familia ha sido su cobijo. A principios del mes de septiembre, agradecía de esta manera a sus hermanas todo el cuidado que le habían profesado:"(...) tengo que agradecerles públicamente que hayan sido y sean cada día mi mayor apoyo. Gracias hermanitas por cuidar de mí como os pidió Aless".

Con la muerte de su madre Ana María, en el mes de mayo, se fue un ancla imprescindible para ella. Aún le queda su padre, quien, a su edad, posee una frágil salud. Ana es consciente de ello pero se resiste a pensar que no pueda disfrutar más tiempo con él, ahora que tanto lo necesita.