La boda de Claudia Osborne, al detalle: del recuerdo a su madre a los mejores looks

El sábado, a las 12 del mediodía, el centro de Jerez de la Frontera se paralizó. Como manda la tradición, la pequeña de las tres hijas de Bertín Osborne y Sandra Domecq, Claudia se casaba con José Entrecanales, hijo del presidente de Acciona, siguiendo los pasos de sus padres y hermanas en la iglesia de San Miguel. Una celebración que los vecinos de la zona quisieron presenciar desde primera línea.

Entre gritos de “¡guapa!” y “¡viva la novia!”, Claudia Osborne cruzó la puerta del templo y caminó hacia el altar del brazo de su orgullosísimo padre, no sin antes, eso sí, vivir una de las anécdotas más comentadas del día: la de la espontánea que se avalanzó sobre el padrino con frenesí.

Superado ese primer momento, todo salió a las mil maravillas. La madrina, María Carrión, estaba espectacular de azul pavo, el novio, radiante y las invitadas, todas ellas con grandes looks, no se dejaron nada en el tintero. De las hermanas de la novia, cada una en su estilo, a las amigas y familiares de ambos, con grandes tocados aprovechando que se trataba de una boda de mañana, cualquier detalle es digno de análisis.

Ahora sí, ninguno como el de la novia con el que, una vez más, homenajeó sus orígines y por supuesto a su madre, a quien tuvo presente en todo momento tal y como confesó la propia Claudia en sus redes sociales.

“Hoy me toca a mí, mamá. Cuánto desearía que fueras tú la que me estuviera vistiendo… Cuánto desearía ver tu cara a mi lado en el altar… pero, tal y como me prometiste, aunque no te sea posible estar físicamente, aquí estarás agarrando mi mano desde el cielo, y así lo sentiré yo. Siempre conmigo”, escribió Claudia en Instagram donde publicó además una preciosa foto de su madre el día de su boda.

El vestido, de una firma jerezana

No fue este el único guiño a su madre en su gran día. Además de casarse en la misma iglesia que ella, Claudia decidió celebrar la fiesta posterior en los jardines de la finca donde creció junto a sus hermanas. Allí, sus padres vivieron sus primeros y más felices años de matrimonio y allí, también, las hermanas han mantenido vivo el recuerdo de su madre en cada rincón de la casa en la que pasaron su infancia.

Además, tal y como han confirmado a Vanitatis personas del entorno de la novia, el vestido de Claudia, cuya autoría no había trascendido hasta ahora, también tenía sello gaditano. Confeccionado por una diseñadora de confianza de Jerez, no se descarta que fuera saliera del mismo taller que cosió el vestido de su madre para su boda con Bertín Osborne en 1977.

Como el de su madre y hermanas, el vestido de Claudia no podía ser más original. Palabra de honor y con una falda en corte recto, estaba confeccionado en una tela completamente bordada de una pedrería que asemejaba una lluvia de perlas. Un diseño perfecto para las altas temperaturas que, aunque comenzado ya el otoño, aún se disfrutan en Jerez de la Frontera.

Los mejores looks de la boda

Si los looks de las tres hermanas de la novia fueron de lo más comentado de la jornada, hubo algunas invitadas que no quedaron atrás en cuanto a elegancia y sofisticación. Desde luego, la ocasión lo merecía.

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P. Izquierdo

Mercedes Bohórquez Domecq fue un buen ejemplo. La andaluza se decantó por un vestido de la colección de invitada de AW21 The IQ Collection, confeccionado con tejido tweed en tonalidad paja. Compuesto por una falda midi, babero cuadrado con toques de terciopelo y volantes, tenía el sello indiscutible de la marca.

Inés Domecq, también invitada a la boda, también lució un diseño de nueva colección de su marca. En concreto, un vestido confeccionado en satén con lunares invertidos en beige y negro compuesto por una falda evasé midi, hombro muy marcado seña de IQ y con un toque de lentejuelas.

Fátima Carrión, tía del novio, también deslumbró con su dos piezas de vestido de raso de seda y abrigo de tul de seda que combinó con pamela de sinamay natural de Mimoki.

La modelo Alejandra Domínguez, pareja de Enrique Solís, también deslumbró con un look exclusivo hecho a medida medida por Antonio García compuesto por top moldeado al bies en crepe de seda verde kaki y falda evasé en mikado natural verde musgo. Lo combinó con un tocado de lo más favorecedor.

Su acompañante en la foto, Victoria Ortiz Martínez-Sagrera, novia de Joaquín de Bélgica, también estaba espectacular de rojo, uno de los colores más repetidos del día.

Más discreto fue el look elegido por la influencer Carla Hinojosa, íntima amiga de la novia. Para la ocasión, se decantó por un conjunto de camisa de seda blanca y falda lápiz negra. Menos es más.

También sencilla pero muy elegante, asistió al enlace Lulú Figueroa-Domecq, de rosa pálido.

Y de la discreción absoluta al derroche de color y originalidad del vestido capa de Frani García Miró (@driftingnomad).

La madrina

Mención a parte merece la madrina, María Carrión. La madre de José Entrecanales y esposa del presidente de Acciona dio una lección de buen gusto con el look elegido para acompañar a su hijo al altar.

En lugar de optar por la tradicional mantilla con peineta, Carrión se decantó por una espectacular pamela XXL en tono natural que fue la gran protagonista del look. En cuanto al vestido elegido, largo, esta vez sí respetando el protocolo, lució un diseño sencillo de gasa de seda color azul pavo, con mangas transparentes y escote en V de lo más favorecedor.

Un enlace por todo lo alto que entroncaba de nuevo a dos de las familias con más solera de la alta sociedad española.