Las palabras de Tamara Gorro tras su operación de urgencia

No son buenos días en cuanto a la salud para algunos de los rostros más conocidos de nuestro país. A través de sus redes sociales hemos asistido últimamente a los ingresos y posteriores altas de Diego Matamoros, de Boris Izaguirre, que se operó para prevenir problemas cardiovasculares, y de Mario Vargas Llosa, que pasó unos días en una clínica debido al coronavirus. Por supuesto, no podemos olvidar el grave percance que sufrió Belén Esteban, que tras un resbalón terminó con una rotura de tibia y peroné.

La última en dar un susto a sus fans y seres queridos ha sido Tamara Gorro, que hace pocas horas informaba a los que ella califica como su propia "familia virtual", la legión de seguidores con los que comparte toda su vida, que volvía a sufrir un contratiempo en su salud.

Además de la "depresión con trastorno de ansiedad mental" que ya ha confesado padecer, la influencer y empresaria se veía obligada a ingresar el pasado martes en el hospital para ser operada de urgencia después de llevar un largo tiempo sufriendo una alarmante pérdida de peso que la llevó a pasar de 64 a 52 kilos sin motivo aparente.

La exmujer del futbolista Ezequiel Garay finalmente comunicaba la noticia desde sus redes sociales, explicando el motivo de la intervención que debían realizarle de forma urgente. "Sabéis que llevo con problemas digestivos muchísimo tiempo, pero desde que estoy enferma, mi bajada de peso no es solo por mi depresión, también es porque cada cosa que ingiero, la vomito", aseguraba en un vídeo publicado en su cuenta de Instagram.

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"Después de hacerme muchísimas pruebas, el equipo médico ha llegado a la determinación de quitarme la vesícula", anunciaba, comunicando así la causa de sus problemas de salud. También aseguraba que este procedimiento serviría para "evitar un problema en un futuro lejano", aunque resignada añadía que "no es el mejor momento para operarme, pero es algo que se tiene que hacer". Antes de entrar a quirófano se despedía diciendo: "Os quiero, todo saldrá bien y pronto vuelvo a estar por aquí dando guerra".

Afortunadamente, la operación ha transcurrido sin incidentes y Tamara publicaba una sonriente imagen suya en el momento de abandonar el hospital. "¡Prueba superada! Casita, reposo y a dejarme mimar", escribía satisfecha. Posteriormente, agradecía sus desvelos a todos los que se han preocupado en las últimas horas por su estado de salud. "Mil gracias por los todos los mensajes, y a partir de ahora ya no os doy más disgustos, que vamos servidos", añadía entre risas.

Demostrando un gran sentido del humor, en una de sus stories confirmaba que "no me han podido arreglar la cabeza. Yo les dije a ver si me arregláis la cabeza y hacemos un 2x1, así que de momento a recuperarse la vesícula". Desde aquí le deseamos una rápida y pronta recuperación en esta y en el resto de sus aflicciones.

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