Laura Borràs: pasión por la literatura, madre orgullosa y un polémico Jaguar
Ahora que la política catalana tendrá que abandonar su puesto como presidenta del Parlament, repasamos algunas de sus polémicas personales y profesionales
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Laura Borràs ha dejado de ser presidenta del Parlament, no por iniciativa propia, pues se ha negado a dimitir, sino por decisión del resto de fuerzas políticas, que han decidido su cese temporal. Las elecciones catalanas trajeron a primera línea a un gran número de candidatos, entre los que destacaba Laura Borràs, quien consiguió convertirse en presidenta del Parlament en segunda vuelta, un puesto que ahora tendrá que abandonar.
Una salida que se produce en medio de una gran polémica, algo que ya debería ser habitual para esta catalana, que ha visto como casi todos sus pasos políticos producían un gran revuelo a su alrededor, pues parece que la polémica la sigue allí por donde pasa. Si no es por sus posesiones, es a causa de la carrera de su hija, con quien comparte pasión por la literatura catalana.
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Doctorada en Filología Románica, la exconsellera de Cultura del Gobierno de Quim Torra proviene de una familia acomodada. Su madre era agente de seguros y su padre, al que recuerda con nostalgia cada 25 de marzo, aniversario de su fallecimiento, era médico, concretamente jefe de urgencias del Hospital Clínic. Una profesión que comparte su marido, por lo menos en esencia, no así en especialidad: Xavier Botet es cirujano especialista en digestivo.
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Juntos han formado una bonita familia que se muestra como un frente unido ante las adversidades. Así tuvieron que hacerlo en 2019, tras hacerse públicas las propiedades de Borràs, sus ingresos, sus planes de pensiones, su vivienda en Barcelona (ciudad que la vio nacer un 5 de octubre de 1970)… y también un Jaguar XF, que habría adquirido en 2012, que conduce su marido, y un Toyota Yaris, de 2013. La polémica estaba servida, pues para mucha gente este coche de gama alta no encajaba con la imagen pública que la política buscaba transmitir.
Esta no ha sido la mayor de las polémicas en las que se ha visto envuelta al margen de la política. De hecho, ha sido su pasión por la literatura catalana la responsable de una de las más importantes. No tanto esto en sí mismo, sino que la compartiera con su hija, algo que ella misma explicó en una entrevista para ‘Vanity Fair’: “Cuando yo salía por la tele y hablaba de libros, me dijo que también quería hacerlo, así que se empezó a grabar en casa explicando lo que leía y subía los vídeos con sus recomendaciones a YouTube”.
Así comenzó la pasión de Marta Botet por los libros cuando apenas era una niña. Un amor que no dejó de crecer y que pronto quiso compartir con todo el mundo, haciendo públicas sus recomendaciones, participando en programas y tertulias y haciéndose un nombre en el sector a pesar de su juventud. Con 18 años ya colaboraba en un programa de televisión haciendo entrevistas a miembros del mundo de la cultura, una posición que fue muy cuestionada teniendo en cuenta su juventud y el puesto de su madre.
Poco después de hacerse pública la polémica, la joven abandonaba el espacio que había estado ocupando y aunque la cadena quiso dejar claro que nada tenía que ver con su madre, lo cierto es que,quien fuera la “primera booktuber catalana”, tal y como la denominaba su madre en la citada entrevista, dejaba de participar en el programa. El final de una etapa que no hacía que sus padres se sintieran menos orgullosos de ella, pues siempre que pueden dejan claro que, para ellos, su hija es alguien digno de admiración. Ahora que tiene 22 años, prefiere mantener un perfil menos público y una vida más tranquila.
Laura ha sabido enfrentar todas estas polémicas y algunas extra, y lo ha hecho siempre mostrando su cara más natural, pues no es habitual que luzca maquillaje en su rostro, por lo menos cuando depende de ella escoger su look; otra cosa son sus apariciones en los medios. Un look desenfadado y fresco con el que consiguió convencer a los votantes, una mujer de altura (metafórica y física, pues mide 1,80 metros) que ha dado la cara por sus creencias y opiniones hasta que le ha tocado dar un paso a un lado. Ahora serán los tribunales los que hablen.
Mientras tanto, ella sigue manteniéndose fiel a sí misma, a su amor por la literatura catalana, no por nada es licenciada en Filología Catalana y doctora en Filología Románica por la Universidad de Barcelona -tal y como apuntábamos antes. Además de ser una autora publicada, su carrera política siempre ha estado muy relacionada con la cultura y las letras. En 2013 fue nombrada directora de la Institució de les Lletres Catalanes y años después coordinó el aniversario de la institución. En 2018 fue consejera de Cultura en el Gobierno de Quim Torra.
Laura Borràs ha dejado de ser presidenta del Parlament, no por iniciativa propia, pues se ha negado a dimitir, sino por decisión del resto de fuerzas políticas, que han decidido su cese temporal. Las elecciones catalanas trajeron a primera línea a un gran número de candidatos, entre los que destacaba Laura Borràs, quien consiguió convertirse en presidenta del Parlament en segunda vuelta, un puesto que ahora tendrá que abandonar.