Pedro Ruiz cumple 75: “No me gustaría haber nacido rey ni príncipe... Es una cárcel de lujo”

Pedro Ruiz ha cumplido este miércoles 75 años en perfecto estado de revista. No mantiene la tradición de celebrar su aniversario e incluso alguna vez se le ha olvidado cuando estaba fuera de España. Era su madre quien se lo recordaba. Las fechas fijas marcadas por el calendario no le atrapan y confirma que “no soy muy fiestero”. Tiene previstos varios proyectos: uno de ellos sería volver a la televisión pública, de donde ha estado ausente dieciocho años; el otro, reestrenar con novedades su última obra de teatro ‘Locos’, que dejó con buen sabor de boca a sus seguidores. Completa su futuro profesional con la edición de un libro de poemas e historias que aún no tienen nombre porque su cabeza nunca para de crear. Es muy activo en las redes sociales y nunca ha bloqueado a nadie.

¿Cómo celebras tu cumpleaños?

Lo celebro muy poco. Es una fecha que pasa y no la he celebrado nunca. Ni cuando era muy joven ni ahora. En los últimos años, coincide con el día del atentado de Barcelona en las Ramblas y, por lo tanto, procuro que sea suave. Lo que he hecho es publicar en mi Twitter una pequeña historia a la que he bautizado como ‘Agua de mar’.

¿Tampoco cuando eras pequeño?

No tengo recuerdos. Te diré que un año que estuve en California aprendiendo inglés y viendo cosas de trabajo, se me pasó. Y me acordé al día siguiente porque me llamó mi madre. No soy muy festivalero ni cumpleañero. Santos tampoco. Sí recuerdo que el día de San Pedro me llamaba siempre Juan Luis Galiardo. Me decía: “Yo solo felicito los santos”. Era un tipo encantador y ahora me llama su mujer.

¿Entonces en esa fecha no haces balance de tu vida?

No suelo hacerlo porque mi vida empieza mañana. Estoy en lo próximo, no en el pasado, que es una buena referencia y una mala residencia. De todas formas, mis 75 años son los 25 de antes.

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¿Qué tienes que decir en estos momentos donde nada se puede predecir?

Hay que ser resistente. Todos los días se presentan dificultades, pero si no sales tú de ellas no te ayuda nadie. Por lo tanto, el tesón y el coraje son fundamentales. Y creo que lo importante es tener planes. Cuando no planteas así la vida, estás muerto.

Hay que ser positivos ante la incertidumbre. Tú siempre lo has sido.

Sí, hay que mirar con buena cara. Tengo una actitud muy positiva y la suerte de una salud extraordinaria por la que doy gracias todos los días. Sé lo mal que se pasa con carencias y lesiones. Mi salud me permite tener muchos planes. Vuelvo al teatro con el espectáculo ‘Locos’, voy a grabar y editar un libro de poemas y más cosas. Mi cabeza siempre está funcionando.

¿Qué sientes cuando desde el Gobierno anuncian un otoño difícil?

Tal y como lo estamos viendo, lo podríamos decir cualquiera de nosotros. Creo que hacemos una vida muy ridícula. Hemos inventado un modo de vivir donde cada vez hay más necesidades, tener más cosas, estar más controlados. Es natural que cada vez se pongan las cosas más difíciles. El planeta tiene su límite y nuestras conciencias también. En vez de educarnos en lo mejor, lo que se hace es educar en el más, que es malo.

Ahora en los colegios todos los alumnos van a pasar de curso, aunque no superen las materias. ¿El esfuerzo no se valora?

Al final el que saca la cabeza es el que más ha aprovechado, el que más talento, coraje y constancia tiene. Puedes coger una sociedad y pintarla y barnizarla para que parezca que funciona, pero luego llega el tiempo que pudre la madera y decolora lo que han pintado. Se puede igualar por abajo y frivolizar el mérito, pero al final del camino el que llega es el que tiene la cabeza bien diseñada

¿El tener la economía resuelta te da la libertad de decir lo que quieres?

Pago un precio por decir lo que quiero y lo tengo asumido hace mucho tiempo. No soy millonario ni ambicioso y no tengo muchas necesidades. Además, tengo a mi favor que ya cumplí con el cuidado de mis padres y no tengo hijos.

¿Hasta qué punto la sinceridad se la puede catalogar de virtud?

Si la sinceridad va unida a fijarte en los defectos del otro, es mala. La sinceridad permanente de los hechos es valentía y se paga. Siempre comento un rótulo que hay en la COPE que dice “La verdad os hará libres”. Y les digo: “Os falta este paréntesis: (pero os dejará muy solos)”.

Te has vuelto muy activo en las redes sociales.

En realidad no lo llevo yo. Le mando a mi secretaria mensajes de lo que quiero publicar y no me enredo en discusiones. Nunca contesto a nadie. He hecho defensa de contenido de televisiones de dudosa ética porque siempre he sido muy contrario. No quiero cambiar a nadie, pero sí resalto que lo que afecta a los bajos instintos pudre la sociedad

¿Se te han quitado las ganas de hacer televisión?

¡Qué va! Nunca se me han quitado las ganas. En realidad es al revés. Yo siempre me he visto en la pública. Estuve dieciocho años presentando proyectos y o no contestaban o no lo contemplaban o no procedía, que todo es lo mismo. Conozco ese mundo y tampoco me pasmo. Tengo la suficiente experiencia para interpretar los gestos. Estoy en negociaciones con la televisión pública y espero que esta vez pueda llegar a buen término.

¿Qué opinas del bono cultura para los más jóvenes?

No tiene que haber dinero para tirarlo. Debe haber para los parados, para los que no tengan medios. Estamos en unos momentos muy duros y todo lo que sirva para ayudar a la gente que no llega, me parece bien

Ahora tienes muchas historias reales y que no parecían creíbles para tus obras: okupas, rey Juan Carlos fuera de España, amantes despechadas...

Te diré que no hay nada nuevo bajo el sol. Todo esto ya ha ocurrido hace seis mil años. En reinados de hace siglos pasaba lo mismo. Tormentas e incendio los hubo siempre, lo que sucede es que cuando se produce en nuestro corto espacio de vida nos parece una novedad. Estamos repitiendo lo que ya se vivió hace mil años.

Has acudido en alguna ocasión a Zarzuela. ¿El rey Felipe necesita gente que no esté en el poder para que le cuente la realidad?

No solo al Rey. A todos les viene bien hablar con personas que no forman parte de los aplaudidores. El Rey es una persona que escucha. Abrirse y ver la calle es bueno. No soy monárquico ni republicano y no he votado nunca. Creo que Letizia lo está haciendo muy bien desde el punto de vista estrictamente humano.

¿Felipe VI tiene esa posibilidad de escuchar con todos los que tiene a su alrededor?

He hablado con él y me pareció que es un hombre que además escucha con atención. No me gustaría haber nacido rey ni infanta ni príncipe ni nada. Es una cárcel de lujo, pero una cárcel enorme. Recuerdo una vez que entrevista a Carod-Rovira en mi programa ‘La noche abierta’ y me dijo: “Oye, ¿tú crees en estos de la independencia?”. Y le respondí: “Yo más que tú porque yo quiero ser independiente hasta de ti. Quiero que mis errores me pertenezcan, pero no por militar, que es un punto de ceguera”.