Tamara, en 'El hormiguero': "Gracias a mis amigos por hacerme ver con quién me iba a casar"

Ha decidido no esconderse, y es que Tamara Falcó no tenía ningún motivo para hacerlo. Tras conocerse y confirmar que quien era su pareja le había sido infiel, ella decidió desconectar de todos y de todo, dejarse arropar por sus seres queridos y dejar pasar un poco de tiempo antes de hacer declaraciones, porque las decisiones las tomó rápidamente.

Borrar la imagen con la que anunciaba su boda con Iñigo Onieva fue el primer paso, no seguir en redes sociales a quien fuera su pareja (y parte de su familia) fue el siguiente. Tras esto, Tamara tomó una última decisión y fue parar de esconderse: la chef optó por dar la cara y continuar con sus compromisos profesionales.

Una decisión que el tiempo ha demostrado buena, no solo porque así ha quedado clara su intención de no perdonar a su exnovio, así como que nunca fue consciente de que él pudiera verse con otras personas, también ha conseguido que muchas otras se sientan identificadas con ella por muchos motivos.

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Desde los más evidentes, como pueden ser el dolor que se siente tras la traición, como otros menos habituales, al igual que le sucede a Risto Mejide, quien tras confirmar su separación aseguraba que le pasaba como a Tamara: no podía entrar en las redes sociales. Estas dos parejas fueron las grandes protagonistas de la actualidad.

Ahora, de nuevo, Tamara no ha querido dejar que el mal de amores se convierta en toda su vida. Por eso no lo ha dudado y, como todos los jueves, ha acudido a su sección semanal de ‘El hormiguero’, un programa en el que ya han dejado claro en más de una ocasión que la cuidan y respetan. Si ella necesita espacio o tiempo, seguro que desde el programa le facilitan las cosas.

Fue en este mismo plató donde confirmó que se casaba, dando detalles concretos, como la fecha y el lugar. La historia esta vez ha sido muy diferente, porque la situación también lo era. Ataviada con un alegre look en rosa fucsia, el color de la temporada, Tamara se ha mostrado encantada de poder centrarse en el trabajo, que considera su gran pilar.

Sus compañeros se han ocupado de que, a la hora de hablar del tema, Tamara estuviera lo más cómoda posible, haciendo que el momento estuviera lleno de risas y bromas. La chef ha comenzado relatando cómo sucedió todo, el relato de los hechos que todos conocemos, como pasó de confiar en la versión de su expareja hasta que la verdad salió a la luz y ahora "el 17 de junio no hay boda", ha confirmado.

A pesar de la situación complicada, Tamara prefiere quedarse con lo bueno: "Por suerte tengo muchas amigas y mucha gente que me quiere y que me ha ayudado mucho". Sus amigos no dudaron en ir al lado de Falcó, refugiada en casa de su madre, donde también acudió su hermana, Ana Boyer, que regresó a Madrid en cuanto se enteró. "También es que tenía un compromiso", ha bromeado Tamara.

Gran parte de la conversación ha estado bañada por las risas, recordando grandes momentos, como el instante en el que la prensa le preguntó, cuando comenzaba el escándalo, si Tamara perdonaría los cuernos: "Me giré como la niña del exorcista, '¿estamos locos o qué?". También ha reconocido que, en realidad, no tiene muy claro qué es el metaverso, "pero sabía que nano era muy pequeño".

Una vez que la versión de Iñigo comenzaba a cambiar, Tamara lo tuvo claro: "Dejé el anillo en la mesa, metí ropa en un bolso y me fui a casa de mi madre". Una decisión que se ha demostrado muy buena para ella, pues se ha sentido muy arropada. "Me voy a quedar con lo bueno, no hubo un momento en el que estuviera sola, todos mis amigos estuvieron allí".

El presentador le cuestionaba si en momentos como estos se refugiaba en su fe y esto hacía que Tamara recordara un momento que vivió hace un tiempo. "En mi familia los divorcios han sido complicados y yo, antes de que pasara todo esto, rezaba y pedía: 'Si no es el hombre para mí, quitádmelo'. Lo que no sabía era que los planes de la Virgen eran quitármelo en televisión", remataba entre las risas de sus compañeros.

Tamara ha mostrado su cara más divertida, poniendo la mejor de sus sonrisas, pero sin evitar algunas indirectas muy directas hacia quien fuera su pareja. "Hay muchísimo más de lo que yo no tenía ni idea. Gracias a mis amigos por hacerme ver con quién mi iba a casar", ha reconocido, así como también encontrarse en un momento "entre la pena y la ira".

Esta es la primera vez que la vemos en televisión desde que se confirmó el final del noviazgo, pero no es la primera que escuchamos su voz. Por primera vez en la historia, Tamara entró por teléfono a ‘Sálvame’ y lo hizo con una intención muy clara, dar las gracias al programa por la investigación que destapó lo que sucedía en su relación. Al principio no quería creerlo, pero las imágenes que se filtraron no dejaban lugar a dudas y pronto se demostró que Iñigo no decía la verdad.

“Estoy un poco en estado de shock”, afirmaba en ese primer encuentro, donde ya se refería a Iñigo como su exnovio. “Reconozco que estoy contenta de que haya salido ahora porque si todas estas noticias hubieran salido estando casada o ya con familia es que hubiera sido terrible”. Un encuentro con la prensa que dejó para el recuerdo algunas frases memorables. “El viernes por la noche empezó a decir: 'Puede que sea verdad'. Le dije: 'Que sepas que me da igual que hayan sido seis segundos o un nanosegundo en el metaverso, como esto sea verdad, esto acaba”. Una frase que, ahora sabemos, fue más inspiración que certeza.

Tamara se mostraba tajante y ponía punto y final a una historia de amor que ella esperaba que hubiera durado toda la vida. Esta ruptura ha dejado a ambas partes con el corazón roto, pues al parecer, Iñigo tampoco lo estaría pasando bien e incluso le pidió perdón públicamente a Tamara. Se espera que en pocas horas, Tamara ponga rumbo a México, donde será ponente en un evento católico.