Tamara Falcó pierde apoyos entre sus amistades: la dura crítica de Boris Izaguirre

Tras la ruptura de Tamara Falcó e Íñigo Onieva, la hija de Isabel Preysler fue elevada a los altares de los mártires. La inmensa mayoría parecía comulgar con su dolor y coincidía en verla como una víctima de una desagradable situación sentimental en la que Onieva era el villano infiel y ella, la santa.

Sin embargo, la imagen de Tamara dio un vuelco radical a los pocos días. El motivo fue el polémico discurso que pronunció el pasado fin de semana en el XIV Congreso Mundial de las Familias, organizado por sectores ultracatólicos y que fue celebrado en México.

"Ahora estamos viviendo un momento muy complicado para la humanidad. Hay tantos tipos distintos de sexualidades, hay tantos sitios distintos donde puedes ejercer el mal, que creo que en otras generaciones no era tan evidente y no estaba tan bien visto". Estas fueron las palabras exactas que la hermana de Enrique Iglesias pronunció durante su intervención.

TE PUEDE INTERESAR

Tamara Falcó rompe su silencio y pide perdón: "Jamás desearía el mal a nadie"

H. Tomás

El vídeo no tardó en traspasar fronteras y hacerse viral. El tufo homófobo de sus palabras fue criticado por muchos, entre ellos, claro está, por gran parte del colectivo LGTBIQ+, que se sintió directamente atacado y decepcionado con la empresaria.

Una de las voces públicas más críticas con la marquesa de Griñón fue la de Jorge Javier Vázquez. El presentador de ‘Sálvame’ aprovechaba su presencia en el plató de su programa para afear la conducta de Tamara Falcó, a la que llegó a calificar como “tóxica para la sociedad”. Además, hizo un llamamiento directo a dos grandes amigos de la hija de Isabel Preysler, Juan Avellaneda y Boris Izaguirre, pidiéndoles que no callasen ante las palabras de Falcó.

El primero la defendió, asegurando que Tamara Falcó no es homófoba y que sus palabras se sacaron de contexto. Eso mismo fue lo que ella había explicado: primero, en redes sociales; y después, en el programa de televisión donde colabora, ‘El hormiguero’, cuando se vio obligada a pedir disculpas en público ante todo el revuelo causado. "Desde hace unos días se me ha acusado de ser homófoba. Nada más lejos de la realidad. La palabra 'desviaciones' hacía referencia a comportamientos que mi ex tenía y que no estaban alineados con mi formar de entender la vida en pareja", dijo. Y añadió: “Pido perdón a cualquier colectivo que se haya visto atacado por mis declaraciones".

Si Avellaneda se mostró comprensivo, no lo ha sido en absoluto su amigo Boris Izaguirre, quien se ha mostrado muy crítico con Falcó este sábado en su columna de opinión de ‘El País’.

"En una suerte de esfuerzo mancomunado conseguimos alejar a Tamara del engañoso Íñigo Onieva. Ahora deberíamos repetir esfuerzo para alejarla de esa ideología odiosa que la rodea", ha expresado el presentador de televisión.

Califica a los organizadores del encuentro en México como "santos radicales” a los que no les importa que a Tamara "le cuelguen el sambenito de homófoba; aunque ella lo niegue, ese discurso lo es”.

Izaguirre no duda en aconsejar a su amiga que se aleje de este tipo de amistades y le solicita una disculpa más contundente que la que ofreció en ‘El hormiguero’: "No es mi estilo sermonear, pero, si tuviera que decirle lo que pienso, sugeriría un alejamiento de las malas compañías y quizás una disculpa explícita. Puedes ser buen católico sin convertirte en ultra”.