El Prado y un alojamiento inusual: todos los detalles de la visita de Glenn Close a Madrid

A pesar de que el frío ha llegado a la capital, parece que el calor ya no es el principal atractivo de nuestro país para los turistas, incluidos los vips. Después de que grandes nombres del universo cinematográfico hollywoodiense, como Dwayne Johnson o Kate Hudson, hayan pisado Madrid en los últimos meses, la ciudad que nunca duerme tiene el privilegio de contar durante esta segunda semana de noviembre con la presencia de la mítica Glenn Close entre sus calles.

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A. Rodríguez Álvaro Rey

La actriz norteamericana de 75 años, que ha sido nominada en ocho ocasiones a los premios Oscar, se encuentra en Madrid con motivo de la presentación de su nuevo documental titulado ‘The Lavander Scare’, un film reivindicativo a favor de los derechos del colectivo LGTBIQ+. Ayer, la ganadora de tres premios Emmy acudió a la Cineteca del Matadero para realizar un coloquio tras el visionado de su nuevo proyecto. Sin embargo, este no fue más que el último plan de un intenso primer día en nuestro país del que conocemos todos los detalles.

Según han desvelado en exclusiva a Vanitatis fuentes solventes, Glenn Close, que se encuentra instalada de manera especial en el interior de la Embajada de Estados Unidos en España, situada en el número 76 de la lujosa calle Serrano, quiso exprimir al máximo su llegada y tan solo unas horas más tarde de su aterrizaje en el aeropuerto de Adolfo Suárez Madrid-Barajas fue a visitar el Museo del Prado, donde, al igual que otros compatriotas, como Tim Burton, se enamoró del lienzo de ‘El jardín de las delicias’, del Bosco.

Sorprendentemente, la mítica Cruella se ha puesto en la piel de una turista común y se ha propuesto aprovechar su breve estancia al máximo con Julissa Reynoso, la embajadora norteamericana, como guía personal, debido a la fuerte relación de amistad que une a ambas mujeres desde hace varios años. Además, tal y como hemos podido conocer, Glenn ya le habría propuesto a la diplomática regresar al mítico centro cultural, porque con las prisas no ha conseguido disfrutar de él al 100%.

Sin embargo, no todos los acontecimientos de la estadounidense en la capital están al alcance del común de los mortales. Fuentes cercanas a la actriz en España nos han revelado que el siguiente paso de la ganadora de tres Globos de Oro fue acudir al palacio de la Zarzuela para disfrutar de un encuentro privado con la mismísima reina Letizia, cuya pasión por el cine es más que conocida por todos y que, al enterarse de la visita de Glenn Close a la ciudad, habría pedido expresamente poder conocerla.

Tras la charla con Su Majestad, fue cuando se trasladó hasta el Matadero de Madrid, donde fue recibida por Andrea Levy, la delegada de Cultura del Ayuntamiento. Vanitatis se ha puesto en contacto con la política y, a pesar de que no ha querido desvelar muchos detalles, sí ha compartido sus sensaciones e impresiones sobre la estadounidense.

“Diría que es atemperada. Te transmite más bien serenidad, pero con el aura de una gran estrella. Le expliqué el significado del Matadero y me dijo que se estaba respirando algo muy especial y muy cultural en Madrid. A modo de anécdota, como gran dama del cine, se hacía de noche, empezaba a oscurecer y cuando nos hicimos las fotos, ella fue la que iba dirigiendo a los fotógrafos, tenía perfectamente estudiado cuál era el mejor enfoque para hacer su fotografía. Para mí fue un honor que pudiese estar en uno de nuestros centros”, son las palabras de la política del PP.

Precisamente, Andrea Levy consideró la proyección del documental un acto valiente, coherente y necesario que sigue la línea del orgullo que siente la capital de recibir y cuidar a las personas LGTBIQ+ bajo un halo de tolerancia y respeto absoluto.

No es para menos, ‘The Lavander Scare’ cuenta la historia de cómo el presidente Dwight D. Eisenhower, bajo un ataque de pánico provocado por la Guerra Fría, decreta que los homosexuales han de ser tratados como "riesgos para la seguridad" y ordena que cualquier funcionario sea despedido en caso de ser gay o lesbiana. Esta caza de brujas que dura más de cuarenta años se termina a manos de un héroe por accidente, que más tarde acabaría convirtiéndose en uno de los principales responsables del movimiento queer.

Este proyecto que ha traído a Glenn Close a nuestra capital no es más que otro ejemplo de su compromiso con el activismo político; es más, la actriz lleva años ejerciendo como vocal en temas como el matrimonio homosexual, los derechos de las mujeres y la salud mental