Así era Antonio Banderas hace 30 años, cuando debutó en Hollywood

Antonio Banderas es uno de nuestros actores internacionales más queridos. Él consiguió hacerse un hueco al otro lado del charco, abriendo camino para todos los que vinieron detrás y demostrando que era una buena idea confiar en el talento español. Un salto de fe que dio de la mano de Madonna y que le cambió la vida para siempre.

Ahora todos conocemos lo que sucedió, cambió su tierra natal por las luces de Hollywood y compaginó el éxito profesional con el éxito personal. Se enamoró locamente de su compañera de reparto en ‘Two Much’, Melanie Griffith, se casó y juntos tuvieron a Stella del Carmen, la más pequeña de los hijos que criaron juntos. Ahora la joven ya tiene 26 años.

Después llegó el final de la relación, el regreso a España y el nuevo amor junto a Nicole Kimpel. Una relación que, a pesar de algunos conflictos que han llevado a pensar que entre ellos las cosas podrían estar finalizadas, sigue en pie, continua sólida como el primer día. El pasado mes de mayo, la pareja celebraba su octavo aniversario y lo hacía con mensaje de amor en las redes sociales: “Ocho años disfrutando de cada segundo a tu lado”.

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Antes de que sucediera todo esto, el actor tuvo que tomar la decisión que señalamos antes, olvidarse del miedo y dejar todo para perseguir su sueño de triunfar fuera de estas fronteras. Como decimos, la amistad que forjó con Madonna -con la que más tarde coincidiría en ‘Evita’- fue clave, como también lo fue el apoyo de quien por aquel entonces era su mujer, Ana Leza.

La primera oportunidad le llegó gracias a la película ‘Los reyes del mambo tocan canciones de amor’, un film al que llegó sin saber inglés y para poder dar lo mejor de sí mismo tuvo que aprenderse sus líneas de manera fonética, un truco que le funcionó a él, pero también a otros actores que han hecho este mismo camino, como Ana de Armas. Corría el año 1992.

Este fue el primer paso de una carrera que ya era imparable, tras esta película llegaron otras que marcaron su carrera y también la historia, como ‘La casa de los espíritus’, ‘Philadelphia’, ‘Entrevista con el vampiro’ o ‘Desperado’, donde coincidió con Salma Hayek. Ella fue quien acogió a Penélope Cruz en su casa cuando la de Alcobendas quiso probar suerte en Hollywood, logrando no solo forjar una amistad inquebrantable, sino también arropar a otras mujeres que, como ella, buscaban su sitio en una industria complicada.

Han pasado muchos años desde esas primeras alfombras rojas en las que Antonio participaba, muchas películas y horas de rodaje, muchos premios y también algunas decepciones. Sin embargo, parece que hay algunas cosas que nunca cambian, como la ilusión que el actor pone en todos sus proyectos personales y profesionales.

No se olvida de sus amigos, como Almodóvar, con quien no duda en colaborar siempre que puede, pero tampoco de su amor por el teatro. El teatro Soho de Málaga es su gran sueño, la ilusión de su vida, con el que ha intentado traer un poco de la escena teatral musical de Broadway a nuestro país. Ahora llega a Madrid con el musical ‘Company’, su nuevo proyecto, una apuesta personal que llega tras el éxito de ‘A Chorus Line’.

Antonio Banderas siempre ha sido uno de los actores españoles más internacionales, pero también un de los más queridos. Ha trabajado muy duro, ha tenido un poco de suerte y ha sabido aprovechar todo eso para forjar una carrera al otro lado del charco y también a este. Incapaz de quedarse de brazos cruzados, ni siquiera cuando su cuerpo le dio un toque de atención con un infarto que casi le cuesta la vida, ahora hace lo que quiere mientras cuida su salud y disfruta.