El reencuentro de Shakira y Piqué en la casa de la mermelada por una buena razón
El exjugador del Fútbol Club Barcelona ha regresado brevemente al que fuera hogar familiar hace unos meses con motivo del cumpleaños de su hijo mayor
Como se puede leer en tantas ocasiones en los comunicados conjuntos que suelen publicar los famosos cuando se termina su amor, de buenas o malas maneras, la pareja rota seguirá guardando la compostura pensando en el enorme amor que sienten por sus hijos. Eso es lo que vimos hacer por ejemplo a Risto Mejide y Laura Escanes poco después de separarse, cuando su hija celebró su fiesta de cumpleaños, y también lo que han hecho otro par de celebs aparentemente peor avenidas: Shakira y Gerard Piqué.
Las cosas entre la colombiana y el catalán no terminaron bien, a la vista está la crónica cantada de despechos e infidelidades. La nueva relación entre el exfutbolista y Clara Chía, la mudanza interrumpida de Shakira a Miami o sus varios litigios en el juzgado por la custodia de sus dos hijos han enturbiado el ambiente, pero al menos durante un rato los dos decidían firmar una tregua temporal por un buen motivo.
La ocasión que merecía enterrar el hacha de guerra ha sido el cumpleaños de su primogénito, que tuvo lugar en la casa que compartieran Shakira y Piqué en Esplugues de Llobregat y donde la barranquillera sigue teniendo a sus suegros de incómodos vecinos, dada su actual situación sentimental.
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Según informa 'El Periódico', mientras en el exterior de la casa los fans de la cantante coreaban sus temas más populares, comenzaba a llegar a la vivienda todo lo necesario para la fiesta, a la que acudieron unos quince niños, entre los que se encontraban el hijo del exjugador del Barça, Patrick Kluivert, al que también se vio en la fiesta que Shakira organizó recientemente en este mismo lugar.
El que fuera su hogar, dulce hogar, se ha convertido de un tiempo a esta parte en escenario de rumores (como el muro que nunca fue) y de famosas historias como la de mermelada, que nos resumía Carmen Lomana recientemente. "A Shakira lo que le sacó de quicio es saber que esa mujer entraba en casa cuando ella no estaba. Ella debe ser una buena ama de casa y sabía que en la casa tenía mermelada por si llega alguien, pero ni Piqué ni ella tomaban nunca y los niños tampoco. De repente, la mermelada desaparecía y dijo: 'Aquí está entrando alguien", explicaba la socialité.
Al parecer Piqué, recién llegado de su experiencia NBA en París, donde se le vio junto a Irina Shayk en una foto que ha dado mucho que hablar, fue el encargado de llevar a sus dos hijos en coche a la casa de su madre, accediendo a la misma a través de la residencia de sus padres. Poco después, el que fuera defensa azulgrana abandonaba el lugar para atender a sus obligaciones en la competición de fútbol y youtubers que preside, la Kings League. Una liga que no deja de sumar adeptos y en la que está aprovechando también para capitalizar las indirectas de su ex, a base de Casios y Twingos.
Mientras todo eso se producía, el catalán tenía que lidiar con otro frente abierto, el de una supuesta infidelidad a Clara Chía, que se mantiene en el más absoluto anonimato desde que se lanzara la 'Sesión 53' de Bizarrap, que destapaba el programa de Telecinco 'Socialité'.
Por su parte, Shakira sigue disfrutando y compartiendo los éxitos que cosecha su última canción, mientras estrena campañas y nuevo perfume. El tema continúa batiendo récords de todo tipo y los dos últimos lo sitúan por segunda semana seguida en el número uno de visualizaciones en YouTube y a ella como la primera artista latina femenina en liderar las escuchas en Spotify. Si la venganza es un plato que se sirve frío, este plato viene además con royalties calentitos.
Como se puede leer en tantas ocasiones en los comunicados conjuntos que suelen publicar los famosos cuando se termina su amor, de buenas o malas maneras, la pareja rota seguirá guardando la compostura pensando en el enorme amor que sienten por sus hijos. Eso es lo que vimos hacer por ejemplo a Risto Mejide y Laura Escanes poco después de separarse, cuando su hija celebró su fiesta de cumpleaños, y también lo que han hecho otro par de celebs aparentemente peor avenidas: Shakira y Gerard Piqué.