Bárbara Rey habla sobre su relación con el rey Juan Carlos: "Nunca he cobrado dinero público por mi silencio"

Bárbara Rey ha vuelto a colocarse en el foco mediático dispuesta a contar prácticamente todos los episodios más importantes de su vida. Después del estreno de la serie ‘Cristo y Rey’ en Atresplayer, donde se cuenta su historia de amor con Ángel Cristo, y el anuncio de su propio documental en la misma cadena, hoy Bárbara se sienta junto a Risto Mejide para enfrentarse a su entrevista más personal.

Tal y como ella ha asegurado, venía dispuesta “a contar y no insinuar”, por lo que la expectación es máxima. De hecho, el propio Risto ha publicado un avance en su cuenta de Instagram en el que calificaba este programa como histórico.

Con una introducción en la que el presentador hacía una reflexión acerca del amor, comenzaba el esperado programa. Antes de que apareciera Bárbara en escena, Mejide conversaba con la periodista Paloma García Pelayo, enfrente de la casa madrileña de la protagonista, para preguntarle qué es lo que todavía no se sabe sobre su vida. “Lo que queda es que ella asuma determinados aspectos de su relación con el Rey emérito”, respondía García Pelayo.

También hablaba con Juan Fernández Miranda, coautor de ‘El jefe de los espías’, sobre si Bárbara chantajeó o no a la familia real. Miranda confirma que hubo dos momentos claves en los que “la amenaza fue real”. Una vez resueltas las primeras dudas, Risto se adentraba en su casa para enfrentarse a la tan esperada entrevista.

Vestida con un elegante traje negro a juego con los zapatos, Bárbara saludaba al presentador y se sentaba en el famoso sofá para responder a todas las preguntas. “Esta conversación requiere que estemos cómodos y tranquilos. Vengo a contar, evidentemente, aunque ya sabes que siempre hay algo que uno se reserva”, comenzaba diciendo Bárbara.

Risto no se anduvo con rodeos y su primera pregunta fue directa: “¿Cuándo conociste al Rey?”. “Yo al Rey le conocí en el año 77. No me lo presentaron, es algo de lo que no he hablado nunca, pero fue él quien me localizó. Me llamó”, contestaba ella sin titubeos. “Yo estaba trabajando y llamó por teléfono a mi casa. Cuando yo llegué de rodar una película, una amiga que vivía conmigo entonces me dijo: ‘Ha llamado un señor que dice que es el Rey’. Yo no me lo creí en aquel momento. Seguro que es algún cómico”, explicaba Bárbara.

Más tarde, y ya estando ella en su domicilio, volvió a llamar y fue entonces cuando se lo creyó: “Me dijo que me seguía mucho y que le gustaba mucho mi trabajo, que le caía muy bien y que le gustaba mucho”. Cuando Risto preguntó si le dijo de quedar, Rey afirmó que “se lo trabajó”. “¿Qué significa eso?”, preguntó el publicista. “Muchas llamadas, muchísimas. En donde además una no sabe qué hacer porque es muy difícil. No sabes en qué puede repercutir para una persona que está trabajando tranquilamente”, respondía Bárbara.

“Yo no sé si será por mi imagen, pero parece que nada de lo que me pasa a mí entra dentro de mi estilo, cualquier cosa mala es como ‘no, es que no es el tipo’. Yo no soy el tipo de mujer que puede ser maltratada, no soy el tipo de mujer que consiga los trabajos por mis méritos, no soy el tipo de mujer de prácticamente nada. Siempre me han encasillado así. No se imaginan que una persona con mi físico pueda tener muchas dudas ante una situación de ese tipo”, explicaba la exvedete.

Siguiendo con el tema de las llamadas insistentes, la actriz lo primero que hacía era desmentir los rumores de que ella nunca había estado en palacio. “Nuestra primera entrevista fue allí, y en varias ocasiones me mandaron un coche para ir”. Risto no dudó en preguntar cuál fue el motivo por el que decidió acudir, a lo que Bárbara contestó que tenía miedo: “Yo estaba trabajando tanto que me preocupaba que al decir que no influyera negativamente en mi carrera”.

En cuanto al primer encuentro, Bárbara lo califica como “una entrevista de amigos”. Confiesa que estaba un poco impresionada y que, en un momento determinado, el Rey le propuso verse de forma más continuada. “Allí comenzó todo. Yo he estado en Zarzuela. No todo ha tenido lugar allí porque yo no lo hubiera permitido, pero sí, yo he estado”.

La siguiente pregunta de Risto fue si se enamoró de él: “Él era muy guapo en ese momento”, comenzó diciendo Bárbara. “No se puedo uno enamorar de una persona así. Puedes quererle mucho, pero si te enamoras es un sufrimiento”. Ante las insistencias de Risto, Bárbara comenzó confesando que sí, que al principio sí se enamoró, pero que con el tiempo fue viendo las cosas de otra manera. “Estuve bastante tiempo enamorada de él, hasta que conocí a mi marido”, confesaba finalmente algo tímida y diciendo que al final estas cosas eran muy íntimas.

También aclaró que, durante ese tiempo, tuvo otras relaciones: entre ellas, con el torero Paquirri y el exfutbolista Carles Rexach. “Teníamos una relación abierta, no podía ser de otra manera. No podíamos exigirnos nada el uno al otro”, aclaraba. Bárbara también desveló que en una ocasión sí vio al príncipe Felipe cuando salía de Zarzuela, pero que apenas intercambiaron unas palabras: “Él era un crío”. Además, contaba que estuvo en muchos actos oficiales, entre ellos cumpleaños, mientras estuvo con Juan Carlos I, pero que esas fotos nunca salieron a la luz.

Una de las cosas que no quiso contestar Bárbara fue el otro lugar donde se veían aparte de Zarzuela, tan solo comentó que era en una casa sin grandes lujos. Risto le preguntó que por qué decidió no seguir adelante con esa relación. “Yo me enamoro de mi marido y decido casarme con él”, explicó la exmujer de Ángel Cristo. “Corté por completo la otra relación. Se estuvo comentando que yo tuve dos relaciones al mismo tiempo, pero es completamente mentira”.

Bárbara también ha contado que cree que durante los años que estuvo con el emérito sí fueron grabadas algunas de sus conversaciones: “Cuando hablábamos por teléfono, yo notaba unos ruidos raros. Yo se lo decía, pero a él le daba igual. No le importaban muchas cosas. Siempre ha creído que era intocable, entonces no le afectaba para nada que nuestras conversaciones las pudieran grabar”.

Una vez aclarada esta primera etapa de su vida, Risto y Bárbara han conversado sobre su relación con el domador de leones Ángel Cristo. “Es curioso porque sé que es un tema del que no vamos a hablar, pero sabes que se ha hecho una serie y a raíz de eso me están pasando cosas increíbles”, comenzaba diciendo ella ante la pregunta de Risto de si calificaría el matrimonio como algo bueno o malo.

“Cuando yo me separo de él, me separo destrozada. Lo pasé muy mal. Cuando te separas de una persona con la que llevabas años sufriendo es difícil recordar momentos buenos”. Visiblemente emocionada, Bárbara reconocía que ella quiso a Ángel con locura, y que él nunca fue consciente de ello: “No se lo creía, era muy inseguro”. Conteniendo las lágrimas explicaba que, gracias a la serie, ella se ha vuelto a enamorar de su marido y que ha llegado a llorar de felicidad. “Mira que es difícil sabiendo todo lo que me hizo después. Pero sí, y yo se lo he dicho a mi hija, algo que le ha hecho inmensamente feliz porque ella no recordaba ningún momento así”, confesaba Bárbara, esta vez ya limpiándose las lágrimas de los ojos.

Para la intérprete fue el hombre de su vida y reconoce que no ha vuelto a enamorarse así después de él. “Nadie ha sabido ver lo que hay verdaderamente dentro de mí”, explicaba. A pesar de estas palabras, ha querido dejar claro que le hizo muchísimo daño prácticamente desde el principio: “Aun así, yo siempre estuve allí”.

En cuanto al tema del maltrato, Bárbara ha reconocido que fue maltratada por él física y psicológicamente desde que se casaron: “El matrimonio se torció muy pronto. Yo debí haberme separado nada más tener a mi hija. Aguanté nueve años, primero porque le quería muchísimo y luego por pena. Porque Ángel me quería con locura, pero no sabía quererme”.

Ha confesado que fue incapaz de decir basta, ya que en los últimos años tuvo mucho miedo, por ella y por sus hijos. Tenía miedo de que les pudiera pasar algo: “Cuando denuncié no me hicieron caso. Me dijeron que ya sabían cómo era. Se reían. Yo les explicaba que creía que me iba a matar, y nada, que ya sabían las sustancias que tomaba, eso era todo lo que me contestaban”.

Finalmente, Bárbara ha contado que se separaron porque fue él quien la echó de casa después de una discusión muy fuerte en la que ella temió por su vida. La dejó fuera, descalza y con un solo abrigo para taparse. “Se volvía loco. Y el revolver no lo dejaba nunca. Me amenazó con el revolver y me encañonó. Incluso me disparó una vez a las piernas, afortunadamente falló”, confesaba Bárbara, muy seria y afectada.

Una vez zanjado ese tema, Risto vuelve a preguntar cuándo retomó la relación con el Rey. “Al poco tiempo de separarme”, contesta ella de forma contundente. “Me llamó en algunas ocasiones para interesarse por la familia en plan amistoso, siempre muy educado”. Bárbara tampoco se ha cortado a la hora de hablar de su colaboración con la UCD, la cual realizó porque se lo pidieron. “No me lo pidió Adolfo Suárez, yo no le conocía. Le vi una vez y mejor no haberle visto nunca”, explicaba. Esta colaboración repercutió negativamente en su carrera. Risto ha intentado sonsacarle quién le pidió esa colaboración, sin éxito, aunque dejando caer que fue el Rey quien realizó esa petición.

Debido a esa colaboración, Bárbara vio cómo empezaba a disminuir su cantidad de trabajo, por lo que pidió una audiencia para comentar la situación. La respuesta le llegó por parte del cuñado del presidente: “No podemos hacer nada, se te ha asociado mucho con el presidente (Adolfo Suárez), que si podíais haber tenido algo… No podemos recomendarte para nada”, relataba Rey.

Llegaba entonces la pregunta más demandada de la noche: “¿Grabaste al Rey en algún momento”, preguntaba Risto. Tras unos minutos de silencio, Bárbara comenzaba diciendo que “era muy largo de contar”. “Sí, tengo dos o tres conversaciones con él. Porque a mí me estaban grabando en otro lugar. No grabé para chantajear, sino por malos comportamientos”.

“A nosotros nos habían grabado donde nos veíamos todo: en la cama, conversaciones y demás… Y pues, mira, una amiga una vez me aconsejó que le grabara y sí lo hice, pero nunca he hecho uso de ellas. Lo único que sé es que me robaron, se las llevaron y las está utilizando otra gente. Pero yo no”.

Ella ha querido matizar que lo único comprometido que se puede ver en esas cintas sobre el Rey emérito era que estaba con ella, nada más, y que muchas veces tenía que cortarle porque le gustaba demasiado hablar, incluso de cuestiones de Estado. “En las camas se habla de muchas cosas. He escuchado muchas cosas, pero eso se queda conmigo”, sentenciaba Bárbara. De la existencia de las grabaciones que le hicieron a ella, se enteró por el rey Juan Carlos, que le dijo que tenían que cambiar de sitio porque donde quedaban estaba todo lleno de cámaras.

En la última etapa de la entrevista, Risto pregunta a Bárbara si realizó ella un chantaje a la Corona con unas supuestas fotos donde se les veía juntos. “No, no fue así”, respondía ella. “No sé por dónde empezar. Él no se portó nada bien conmigo. Se portó muy mal. Me perjudicó enormemente a nivel profesional, tanto él como su entorno. Y yo tenía que mantener a mis hijos”, continuaba explicando Rey.

“Fue entonces cuando yo le hablé claramente. Pero hablé con él. A partir de ahí no sé con quién habló ni que hizo, lo desconozco. Yo solamente sé que me puse a trabajar en televisiones públicas, y desde luego el dinero que yo cobraba era dinero público, pero porque venía de televisiones públicas. Y si alguna vez hubo algo que viniera de los fondos, yo eso lo desconozco por completo”. Con esto Bárbara dejaba claro que nunca le pagaron por su silencio, que no recibió ni un euro por ello y que el chantaje fue por parte de otra persona que hoy en día ha fallecido.

Como última confesión, la actriz ha desvelado que pasó por un momento muy duro económicamente, ya que no trabajaba debido a la relación que mantuvo con el emérito, y que cuando llamaba para pedirle ayuda, su respuesta era: “Ah, si yo tuviera una varita mágica…”.

La actriz también ha contado que cuando grababa en la calle tenía que estar completamente protegida por policías y que después pasó a estar completamente vetada. “Yo no le deseo nada malo; de hecho, pienso que debería estar en nuestro país, pero no quiero seguir hablando más de él”.

La entrevista finalizaba con la siguiente pregunta: “¿Alguna vez le has pedido dinero al Rey?”. Sin dudarlo, Bárbara contestaba: “Alguna vez he dejado entrever que me hacía falta, muchísima falta. En una ocasión que mi hermana estaba enferma de cáncer. Pero no sirvió de nada. Como el que oye llover.”

Con estas palabras, Bárbara Rey daba por finalizada una entrevista muy completa y en la que no ha tenido reparos en contestar a ninguna de las preguntas, demostrando una gran generosidad con el formato y aclarando así muchas de las dudas que hoy en día eran una incógnita.