La broma de Tamara Falcó a Laura Boyer en el entierro de su padre, Miguel

Nos hemos despertado este miércoles con una sorpresa en las portadas dedicadas al mundo del corazón. Solo unos días después de su fallecimiento, 'Semana' publica una entrevista póstuma con la hermana paterna de Ana Boyer, con la que hablaron, según la revista, dos semanas antes de su muerte. Una conversación en la que la economista da todo tipo de detalles de la relación con Isabel Preysler y sus hijos, incluyendo una anécdota con las palabras que Tamara Falcó dijo a Laura Boyer en el entierro de su padre, Miguel.

Aunque pueda parecer que no es el escenario más apropiado para hacer una broma, Laura Boyer no se la tomó a mal para nada, todo lo contrario. De hecho, es una anécdota que pone como ejemplo para hacer ver la estupenda relación que tenía con Tamara Falcó, ya que la había conocido desde pequeña. La economista contaba a 'Semana' en esta última entrevista antes de morir cómo en el entierro de Miguel Boyer, la diseñadora le cogió el brazo en el cementerio de San Isidro y le dijo: "Qué susto se va a dar el tío Miguel cuando se encuentre a Dios de frente", haciendo referencia a su ideología religiosa, ya que el que fuera ministro de Hacienda con Felipe González siempre se confesó ateo.

Por las palabras que vemos plasmadas en esta entrevista póstuma, se nota que Laura Boyer guardaba un especial cariño a Tamara Falcó. De hecho, confiesa que de los cinco hijos de Isabel Preysler, era su propia hermana, Ana, con la que tenía peor relación. En cambio, asegura que tanto Chábeli como Enrique Iglesias le caen fenomenal, afirmando que se portaron con ella como una hermana cuando vivía en Miami y que tuvieron con ella gestos de cariño con los que se sintió muy reconfortada. Saca de la ecuación, en cambio, a Julio Iglesias Jr., con el que, según sus palabras, tuvo menos trato.

No desprenden el mismo cariño sus palabras hacia Isabel Preysler, desde luego. Más bien todo lo contrario. Ya en la portada nos encontramos con unas declaraciones muy duras sobre la llamada 'reina de corazones': "Isabel alejó a mi padre de nosotros". Una máxima que desarrolla en la entrevista, dando detalles del antes y el después de Miguel Boyer. El antes, un hombre familiar, al que consideraba un "padrazo", y que no miraba el dinero. El después, totalmente diferente, mucho más escrupuloso con la economía y que veía a sus hijos "en algún restaurante y poco tiempo", según las palabras de Laura.

Su gran queja es que Isabel Preysler alejó a Miguel Boyer de sus propios hijos y no duda en calificarla como una mujer "fría y muy calculadora", confesando que llegó a odiarla tras la muerte del ministro: "Mientras él vivió, solo la tenía como una enemiga", dice. Y otra de las acusaciones contra la madre de Tamara Falcó es que no cuidó a Miguel tras sufrir el ictus que lo llevó al hospital durante varias semanas: "Le puso un montón de gente para cuidarle, pero ella no le cuidó", asegura. Y añade que la poca relación que ha tenido con ella "ha sido con muchísima hipocresía".

No falta una referencia a la herencia, un tema del que también se desprende el dolor de Laura Boyer. Recordamos en este punto que la familia de Miguel tardó cuatro años en dar por zanjado el reparto de bienes. Durante ese tiempo, las quejas de los hijos del primer matrimonio iban también dirigidas a Isabel Preysler, pero especialmente a Christian Boyer, hermano del que fuera ministro, que también era el albacea. Le acusaban de mirar más por la esposa de su padre que por sus hijos. Finalmente, en 2018 se pudo dar carpetazo al asunto, aunque no sin desavenencias.

Es la propia Laura la que cuenta los detalles y los motivos por los que renunció a lo poco que pudiera corresponderle de su padre. Asegura que le salía más caro aceptarlo que renunciar a ello: "Solo me pedían dinero y me daban un busto y unas guías de Madrid. Entre el gasto de llevármelo y los gastos médicos que me reclamaban, decidí ir a un notario y firmar la renuncia".

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'Semana' cuenta cómo se gestó esta sorprendente entrevista, realizada solo dos semanas antes del fallecimiento de Laura Boyer. Era el pasado día 24 cuando conocíamos su muerte a los 57 años y tras no poderar superar una enfermedad que padecía desde hacía un tiempo. Así, la publicación concluye que ella misma sabía cuál iba a ser su final y que quería dejar plasmado todo lo que le había rondado por la cabeza en las últimas décadas, especialmente en lo tocante a Isabel Preysler y su relación con ella.

La entrevista surgió porque, previamente, Laura Boyer había hecho llegar un escrito a la revista 'Semana', una "especie de carta abierta", como apunta la propia publicación en el reportaje. Finalmente, las dos partes concluyeron que era mejor que mantuvieran una conversación que permitiera a la hija de Miguel Boyer desarrollar sus pensamientos. Un último deseo que hemos visto cumplido este miércoles, con la sorprendente publicación de esta entrevista póstuma.