Carmen Cervera y sus 80 años sin celebración especial y alejada de su hijo

Carmen Cervera cumple 80 años el próximo 23 de abril. Al ser una cifra redonda y con entrada en un nueva década, a cualquiera que estuviera en las mismas condiciones que la baronesa le gustaría celebrar el aniversario a lo grande. En el caso de la coleccionista no habrá fiesta multitudinaria y sí una reunión familiar con sus niñas, su sobrino, su mujer y sus hijos, y posiblemente Borja.

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Patricia Martin

Y digo posiblemente porque las relaciones se enfriaron a raíz de la entrevista de su madre con Risto Mejide, donde dejaba en el aire una respuesta cuanto menos polémica. La cuestión tenía que ver con la paternidad de las mellizas que fueron engendradas por maternidad subrogada en Estados Unidos. La pregunta de Mejide aparecía en las publicidades previas a la emisión de la entrevista que se hizo en el museo de Málaga, donde se encuentra parte de la colección privada de Carmen Cervera. Las otras están en Cataluña y la más amplia en el museo Thyssen, alquilada al Ministerio de Cultura por quince años.

No hubo polémica tras el encuentro televisivo porque Borja Thyssen lo impidió a través del bufete profesional que lleva sus asuntos. Desde esa fecha, no hubo comunicación entre ambos, pero es posible que para este 80º cumpleaños el hijo deje a un lado el enfado y se traslade a Andorra o San Feliú, donde se encuentra la villa Mas Mañanas. Este lugar es realmente el paraíso de la baronesa y donde le gustaría vivir. No puede porque tiene su residencia fiscal en Suiza, lo mismo que su hijo, ambos con esa nacionalidad, igual que las mellizas Carmen y Sabina.

A Borja ya no le hace falta pasar tanto tiempo en su casa de Andorra junto a la de su madre para justificar los 184 días que debe vivir fuera de España. Cuando amplió su patrimonio inmobiliario con la casa de Gstaad y la de Abu Dabi, la familia al completo disfruta de estancias en esos lugares. En el primer caso, y hasta que esté remodelada, alquilan; y en los Emiratos los Thyssen/Cuesta tienen una villa en perfecto estado, de revista, los doce meses del año. Pasaron toda la Semana Santa y más días por delante y por detrás.

La baronesa y su hijo no se han vuelto a ver desde fin de año. Esa noche se unieron a la cena los padres de Blanca y sus hermanos. Todos juntos, en plan familia feliz. Es posible que de nuevo se retome en este aniversario tan especial de la coleccionista y mecenas.

Atrás queda una vida llena de experiencias desde cuando solo era Tita Cervera, una chica alegre que disfrutaba de la vida. El momento más especial fue la llegada al mundo de Borja.

Eran tiempos donde una madre soltera no era bien vista. Explicaba en la revista ‘Protagonistas’, del grupo Zeta, que nunca se planteó tener un hijo con Alex Barker porque “yo era muy jovencita” y tampoco con Espartaco Santoni. “No venía clara nuestra situación. Un hijo entonces hubiera sido un desastre. De modo que al final he sido madre soltera. No me importa lo que pueda pensar la sociedad. Tengo la suerte de tener a mi madre conmigo”.

No se supo quién era el progenitor hasta tiempo después que ella misma lo contaba en ese mismo medio asegurando que “Manolo Segura no se ha portado bien como padre”. Después llegó la calma y volvieron a mantener una excelente relación. Tanto es así que anunciaba: “Le quiero mucho y no me importaría que fuera el padre de mi segundo hijo”. No hubo más descendencia. Tampoco con el barón Thyssen, que lo que sí hizo fue adoptar al niño. Borja se convirtió en heredero de un gran imperio gracias a su madre.