María Pombo confiesa lo que Papín piensa de su última manicura veraniega

Llega el calor y, con él, los colores alegres. Por lo menos, eso parece haber pensado María Pombo a la hora de seleccionar los colores para su última manicura, tonos ácidos con un toque vitamina que llenan de energía sus manos y sus días, y que parecen haberse convertido en todo un éxito en sus redes sociales.

Es complicado conseguir consenso con estas cosas, y María, esta vez, lo ha aprendido por las malas. No han sido una horda de haters que han querido dejar claro su disparidad de gustos; de hecho, casi se podría decir que no hay más responsable que ella misma, pues ha querido preguntarle a Papín, tal y como las hermanas llaman a su padre, lo que opinaba al respecto.

A lo largo del tiempo, Papín ha destacado por muchas cosas, pero edulcorar su opinión nunca ha sido una de ellas. “¿Te patrocina el pintado de uñas Petit Suisse?”, preguntaba haciendo referencia a los colores escogidos, rosa y naranja. “¿Qué te pagan? Imagino que una fortuna”.

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Una declaración que seguramente no se alejaba demasiado de lo que su hija esperaba, porque al compartir la parte de la conversación en la que todo esto sucedía se podía ver como ella misma se mostraba un poco insegura de la respuesta de su padre. Una respuesta que no ha decepcionado y que se ajusta a lo que ella esperaba, teniendo en cuenta el humor con el que la ha compartido.

Porque, a pesar de lo que pueda parecer, no hay duda de que este tipo de bromas son habituales entre ellos. No es la primera vez que comparten las respuestas de su padre. Sabiendo que conseguirán una carcajada entre sus seguidores, porque él no tiene ningún reparo en decir lo que piensa y de un modo que consigue poner una sonrisa en la cara de sus hijas, casi siempre.

De hecho, Papín no se ha quedado tranquilo con su escueta respuesta y ha querido ampliar su reflexión a través de un audio, en el que no solo deja claro que no ve motivos para llevar así las uñas a no ser que haya un intercambio monetario, también que le parece que María ya no tiene edad para llevarlas. "Cada edad tiene su afán y ese colorinchi", le explica en el audio compartido por María, "a tu edad, empieza a ser un poco delicatessen".

Víctor Pombo, como realmente se llama Papín, es todo un referente para sus hijas, que nunca ocultan el orgullo que sienten hacia sus padres. Durante mucho tiempo se dedicó al mundo de la publicidad junto a su mujer, Teresa Ribó, pero decidieron darle un giro a su vida y abrir un restaurante en la capital, Camino Food and Drinks, todo un éxito que pronto se convirtió en uno de los locales de moda.