Carmen Lomana tiene mucho que decir sobre la historia de amor de Enrique Ponce y Ana Soria

La colaboración de Carmen Lomana en ‘Espejo público’ se espera cada jueves como agua de mayo. La opinión de la socialité, ya recuperada de su intervención en el cuello, es muy bien valorada por sus compañeros de tertulia, deseosos de conocer qué pensaba sobre la entrevista ofrecida por el diestro Enrique Ponce y su pareja, Ana Soria, en ‘El hormiguero’.

Carmen Lomana tenía mucho que decir sobre la noche que Ana Soria ha guardado “para siempre” en su corazón. A la empresaria le llamó mucho la atención que Enrique Ponce tomara la palabra el primero para rechazar los juicios dirigidos hacia su pareja cuando comenzaron su relación en 2019. “Según Enrique, ella es buenísima y empatiza con todo el mundo, y no entiende que la criticasen si no la conocían”, explicó.

La colaboradora corrige incluso al diestro: “Le faltó hablar del tema principal. Nadie ha criticado que se enamorasen ni tampoco la diferencia de edad entre ellos. Todos estábamos sorprendidos e indignados por el arrebato de alguien que olvida que está casado, que tiene dos hijas, una de ellas adolescente, y empieza a hacer demostraciones públicas y en redes sociales de su nuevo amor”.

En aquel momento, Carmen Lomana cree que Ana Soria debía haber demostrado “suficiente cabeza” para hablar con su nueva pareja y haberle recordado que “no estaba separado aún y debía respetar a su mujer, y no hablar en público del amor de su vida”. Además, quiso aclarar que sus palabras no tienen que ver con que “Ana sea joven y mona, y que se hayan enamorado”.

Como el resto de tertulianos, se sorprendió con la reaparición de la que se ha convertido en la pareja más mediática del momento, y no se perdió detalle. Y tras ver el programa de Atresmedia, coincidió con su compañera de mesa, Marina Castaño, en calificar la entrevista de “innecesaria y tremendamente cursi”. Carmen Lomana reconoció también que, al terminar ‘El hormiguero’, sus conocidos la habían bombardeardo con mensajes diciendo “qué vergüenza”.

Para ella, la conclusión de este relato pormenorizado de Enrique Ponce y Ana Soria de los inicios de su romance es que “debían haber tenido en cuenta a terceras personas”, en este caso a Paloma Cuevas, a quien Carmen Lomana conoce. “A ella le costó aceptar lo que estaba pasando con su entonces marido, incluso cuando ya se hacía pública la relación con Ana Soria. Pensaba que iba a volver. Quizá no era consciente porque estaba volcada en el cuidado de sus padres, que vivían con el matrimonio”, agregaba.

Carmen Lomana definió como “el engaño” el momento en el que el diestro cuenta en la entrevista cómo descubrió a Ana Soria en el tendido en Almería, en una corrida que no se corresponde con el año en el que comenzaron a salir. Y como a Susanna Griso y al resto de invitados, a ella también le pareció “una paradoja” que exigieran privacidad exponiendo su vida en televisión.