Las caras de preocupación de Patricia Llosa y Morgana a las puertas de la clínica Ruber

• Mario Vargas Llosa, ingresado por complicaciones del coronavirus
• El último plan familiar de Vargas Llosa antes de su ingreso

Semblante serio y cabizbajas, así entraban en la clínica Ruber de Madrid Morgana Vargas Llosa y Patricia Llosa tras conocerse el ingreso en este hospital del escritor Mario Vargas Llosa por coronavirus. El ganador del Premio Nobel de Literatura permanece ingresado en este centro médico desde el pasado sábado, como sus hijos anunciaron a través de las redes sociales.

Unos días en los que el autor de 'La fiesta del chivo' ha permanecido aislado, siguiendo los protocolos establecimientos en relación con el covid-19. Así, aunque no han podido visitar en persona a su padre y su exmarido, respectivamente, Morgana Vargas Llosa y Patricia Llosa sí han podido conocer los nuevos datos médicos y la evolución del escritor.

Sin querer responder a los periodistas que aguardaban a la salida de la clínica Ruber, madre e hija se han dejado ver con el rostro serio. A paso rápido, con un look muy informal y Morgana con gafas de sol, han intentado evitar las cámaras, manteniendo en todo momento el silencio sobre cómo se encuentra el literato a sus 87 años.

No obstante, tal y como ha podido conocer Vanitatis a través de fuentes cercanas a la familia, a pesar de ser conscientes de la gravedad de tal enfermedad en un paciente de su edad, son optimistas con la evolución del Nobel, quien sufre los síntomas típicos del covid-19, entre ellos fiebre.

Una máxima que se repite desde que anunciaran este nuevo ingreso de Mario Vargas Llosa a causa del covid-19, ya que tras comunicar vía Twitter el estado de salud, la familia ha preferido no añadir más datos sobre su evolución. “En vista del interés de los medios por el estado de salud de nuestro padre, hacemos público que está hospitalizado desde el sábado tras habérsele diagnosticado el covid-19. Está siendo tratado por excelentes profesionales y acompañado por su familia. Rogamos a los medios de comunicación respetar en estos momentos su privacidad y la nuestra”, escribieron en dicha red social.

Manteniendo la misma línea de actuación que ya llevaron en abril del pasado año, cuando Mario Vargas Llosa también tuvo que ser ingresado por coronavirus. Entonces, también fueron sus hijos quienes comunicaron la noticia de su ingreso, aunque mucho ha cambiado desde entonces la vida de Mario Vargas Llosa.

Si en abril de 2022 llegaba al hospital para su ingreso acompañado de Isabel Preysler, su entonces pareja, y de Tamara Falcó, en esta ocasión cuenta con sus hijos, pero también con el cariño de su exmujer desde 2018, Patricia Llosa.

A lo largo de los últimos meses, desde la ruptura del escritor y la socialité, no ha sido extraño verles juntos en eventos familiares y junto a amigos en común. Así, hace unas semanas compartían confidencias y sonrisas en la República Dominicana o en marzo cuando celebraron el cumpleaños de Mario Vargas Llosa juntos.

Además, hace apenas unos días, a comienzos de junio, visitaba junto a su familia la exclusiva bodega Valduero, siendo esta la última ocasión en la que pudimos ver al premio Nobel en público antes de su ingreso por coronavirus. Una retomada buena sintonía que hace que Patricia Llosa, junto a sus hijos en común, sean el gran apoyo de Mario Vargas Llosa en estos momentos de salud delicada.