Los detalles del bautizo que reunió a los Verdasco y los Carmona: sorpresas, bailes y una gran ausencia

Este fin de semana era una fecha importante para los Carmona y los Verdasco, dos familias unidas gracias a una de las parejas más solventes del corazón: la formada por Sara Verdasco, hermana del conocido tenista, y Juan Carmona, sobrino del líder de Ketama, Antonio Carmona. No obstante, no eran ellos los protagonistas, sino sus hijas Valentina y Carmen, que este viernes recibieron el sacramento del bautismo en una conocida iglesia ubicada en el centro de Madrid.

Las pequeñas, que cumplieron tres años en julio, fueron bautizadas ante la atenta mirada de sus padres, abuelos, tíos y algunos amigos de la familia, que tras la ceremonia bailaron, brindaron, cantaron y disfrutaron hasta altas bien entrada la tarde. "Un viernes muy especial, gracias a nuestra familia y amigos que compartieron con nosotros un día tan importante para nuestras hijas, su bautizo", escribió la propia Sara en sus redes haciendo un repaso de este día tan importante.

Tras una emotiva ceremonia en la que Fernando Verdasco ejerció de padrino desde el altar, donde estaba ubicada la pila bautismal, todos los invitados posaron en la escalinata del templo a la salida.

Para la ocasión, Sara Verdasco, aconsejada por su hermana pequeña, Ana, estilista de profesión, se decantó por un elegante vestido de Mirto de escote cerrado, manga larga y un ligero estampado similar al que lució su cuñada Ana Boyer durante la preboda de Tamara Falcó el pasado 7 de julio.

De hecho, esta fue una de las grandes ausentes. Aunque sí asistió Fernando, como decíamos, su esposa por motivos que no han trascendido todavía se perdió esta cita familiar. Sus hijos, Mateo y Miguel, tampoco asistieron.

Entre las invitadas más elegantes destacó la presencia de Mariola Orellana, tía abuela de las niñas y esposa de Antonio Carmona, que lució un vestido en tonos turquesa de lo más favorecedor, así como su hija Marina, espectacular con un conjunto rojo y la melena suelta.

Tampoco se perdieron el bautizo Álvaro Castillejo Preysler, primo de Tamara Falcó y de Ana Boyer y gran amigo de la familia Verdasco, que estuvieron invitados a su boda, así como su mujer, Cristina Fernández, que acudió con el vestido camisero de estampado marino que lució también en la preboda de Tamara, igualmente de lo más apropiado para una cita como esta. También asistió Andrea Prat, hermana del televisivo Joaquín Prat e íntima de Sara Verdasco.

Finalizada la ceremonia, todos los asistentes pusieron rumbo al lugar elegido para la celebración, donde los Carmona, los Verdasco y varios amigos íntimos de la familia, como Rosario Flores, se dieron cita para continuar con los festejos de esta jornada tan importante para ellos y su fe.

De hecho, en varias imágenes compartidas en redes sociales se pudo ver como hicieron gala de sus aptitudes artísiticas y no hubo quien no se arrancara a cantar o a bailar para animar a los allí presentes en un momento u otro de la velada.

Una jornada en la que las niñas no perdieron su papel protagonista en ningún momento. Vestidas a juego de blanco, como manda la tradición, recibieron alabanzas y cariño de parte de todos, fueron sorprendidas con una tarta rosa de dos pisos adornada con ositos y sus nombres (algunos medios apuntan a que era de fresa y nata, sus sabores favoritos) y bailaron junto a sus familias divertidas y joviales.

Un día para el recuerdo en el que encontraron la excusa perfecta para reunirse, celebrar y divertirse.