La Casa de Alba, una pyme endiabladamente familiar
La Fiscalía se ha querellado esta semana contra una de las sociedades de los hermanos por el presunto uso ilegal de unos pozos en Doñana
Esta semana, la Casa de Alba ha sido noticia a raíz de una querella puesta por la Fiscalía contra una de sus empresas agrícolas por un presunto delito medioambiental. La sociedad ya ha dado explicaciones y, según su versión, no hay delito. Aunque en un principio se señaló directamente a Eugenia Martínez de Irujo, duquesa de Montoro, como responsable del asunto por su papel como presidenta de Eurotécnica Agraria SA (la entidad afectada), lo cierto es que el papel de la duquesa es meramente representativo.
La confusión viene porque los hermanos explotan las 45.000 hectáreas de terreno rural que les legó su madre a través de distintas empresas agrícolas de las que todos son accionistas y en las que se turnan los puestos más representativos, aunque en la práctica cada empresa sea gestionada solo por uno o varios de ellos, como en este caso. Eurotécnica Agraria está administrada por Alfonso Martínez de Irujo, duque de Híjar, y su hijo Luis.
Lo cierto es que la Casa de Alba del siglo XXI es mucho más de lo que llega a la prensa del corazón. La institución ha sabido combinar su peso histórico con el signo de los tiempos. El patrimonio exacto de la institución es incalculable. En vida de la duquesa Cayetana, técnicos del Ministerio de Hacienda lo situaron en una horquilla entre los 2.200 y los 3.200 millones de euros y la revista 'Forbes' en 2.800, aunque ambas cifras han sido puestas en duda por los miembros de la familia.
La mayor parte de esa 'fortuna' está considerada patrimonio histórico y se integra dentro de la Fundación Casa de Alba. Otras muchas propiedades se encuentran cedidas a las instituciones públicas para su explotación y correcta conservación, como algunos castillos, torreones y heredades medievales. En terreno, los hermanos heredaron de su madre cerca de 45.000 hectáreas (la cifra la reveló el propio Cayetano Martínez de Irujo en su polémico libro) entre Salamanca, Sevilla, Córdoba y Ávila. Desde que falleció la duquesa, cada hermano gestiona su parte.
El jefe
Buena parte de estos miles y miles de metros cuadrados son terrenos rurales dedicados a la explotación agrícola y ganadera. El jefe de esa macroempresa que son los Alba hoy en día es Carlos Fitz-James, el duque titular, que cuenta con un bagaje empresarial propio y está imprimiendo un nuevo pulso a la gestión económica de la institución. Suyo ha sido el empeño de poner a disposición del público ese patrimonio que en vida de Cayetana guardaban celosamente, abriendo los principales palacios de la familia. Y suyo también el impulso que se nota en las empresas del clan. La mejor muestra, Euroexplotaciones Agrarias SA.
Esta empresa gestiona más de 3.000 hectáreas de terreno en El Carpio (Córdoba) dedicadas a la producción agrícola y ganadera, pero sobre todo y cada vez más a la explotación de energías renovables. En 2020 empezaron a plantar almendros de forma intensiva y se decidieron a renovar el olivar, que también pretende explotarse de forma intensiva, una tendencia al alza en todo el campo español. Tras pedir varios créditos para afrontar esa renovación, la sociedad logró unos beneficios en el ejercicio 2021 de 270.000 euros. Está presidida por Carlos Fitz-James y sus hijos, Fernando y Carlos, están también en su órgano de administración. Cuenta con un activo de 30 millones de euros.
El duque de Alba y su hijo pequeño, Carlos Fitz-James Stuart de Solís, administran solidariamente también la empresa Castrofresno SA. Dedicada a la explotación agrícola y ganadera, gestiona los terrenos del duque en Rivilla de Barajas (Ávila) y en Salamanca. En 2021 cerró en negativo. El duque de Alba aparece en otras dos empresas agrícolas, Sercarpio y Explotaciones El Redondillo, que no tienen las cuentas actualizadas.
Rentable
Eugenia Martínez de Irujo preside Eurotécnica Agraria, dedicada a la producción agrícola y ganadera y que centra su actividad principalmente en Carmona (Sevilla), aunque tiene su sede social en el palacio de Liria. Es una presidencia virtual, dado que en la práctica la gestión está en manos de Alfonso Martínez de Irujo, duque de Híjar, y su hijo Luis, como ya hemos dicho aquí. Es esta la empresa contra la que se ha querellado la Fiscalía por un presunto delito medioambiental.
Sigue el mismo esquema de Agralsa SA. La otra gran empresa agrícola de los hermanos está presidida por el editor Jacobo Fitz-James, duque de Siruela, y la mayor parte de los hermanos aparecen también en el organigrama. Agralsa SA gestiona los terrenos de la familia en Salamanca y ha actualizado recientemente sus cuentas. En el ejercicio 2022 logró casi 100.000 euros de beneficios. Se dedica a la "adquisición, explotación, arrendamiento o venta de fincas rústicas, agrícolas, ganaderas o forestales, así como a la cría y el engorde de ganado".
Aunque durante mucho tiempo las tres joyas inmobiliarias de la familia se consideraron inaccesibles al público, eso cambió con la muerte de Cayetana de Alba. El 'nuevo' duque, más sensible al signo de los tiempos y a lo que se estaba haciendo en otras casas nobiliarias europeas, puso en marcha una política completamente diferente. El primer paso lo dio en marzo de 2016, cuando decidió abrir al público uno de los palacios privados más famosos de España, Dueñas, en Sevilla. El proceso se completó con la apertura del palacio de Monterrey (Salamanca) en 2018 y Liria en 2019. Un buen ejemplo de cómo han cambiado las cosas es la exposición que acaba de inaugurar en Liria sobre la Casa de Alba y la moda.
Visitas récord
Entre el campo, los palacios-museo, la fundación y demás, la Casa de Alba emplea a decenas de personas en Córdoba, Sevilla, Madrid y Salamanca. Y parece que la gestión va dando sus frutos. La mejor prueba de que el duque de Alba no se está equivocando al descubrir al público las tripas de sus mejores propiedades son los datos de visitas. Según cifras facilitadas a Vanitatis por el Observatorio Turístico de Salamanca, en el primer año de su apertura (desde el 11 de mayo de 2018 a la misma fecha de 2019), Monterrey recibió un total de 24.470 visitantes. Solo en la primera semana de apertura del palacio de Liria, los Alba recibieron 1.800 visitas y generaron una lista de espera de varios meses. Respecto al palacio de Dueñas, los datos son muy satisfactorios. La ruta por las casas-palacio en la que está integrada es la más popular de las que se hacen en Sevilla, y la tercera entre los monumentos más demandados, con cerca de 385.000 visitas en un año.
Además, la Casa de Alba no deja de mirar hacia el futuro y explora nuevas posibilidades de desarrollo de negocio, como la línea de comida gourmet, una idea de Cayetano Martínez de Irujo, por cierto, que desde hace ya años gestionan los hijos del duque de Alba, quienes tienen grandes proyectos para ella.
Esta semana, la Casa de Alba ha sido noticia a raíz de una querella puesta por la Fiscalía contra una de sus empresas agrícolas por un presunto delito medioambiental. La sociedad ya ha dado explicaciones y, según su versión, no hay delito. Aunque en un principio se señaló directamente a Eugenia Martínez de Irujo, duquesa de Montoro, como responsable del asunto por su papel como presidenta de Eurotécnica Agraria SA (la entidad afectada), lo cierto es que el papel de la duquesa es meramente representativo.