Fernando Verdasco cumple 40 años: los detalles de su celebración en casa de Preysler

Fernando Verdasco cumple hoy, 15 de noviembre, cuarenta años. Una importante onomástica que el tenista no ha querido dejar de celebrar con su familia y sus íntimos amigos. Lo hizo el fin de semana pasado con una comida y una posterior fiesta en la casa de Puerta de Hierro de su suegra, Isabel Preysler, el cuartel general donde se instala junto a Ana Boyer y sus dos hijos cuando pasan temporadas en España.

Alrededor de la piscina cubierta de la residencia Preysler se dispusieron una serie de mesas redondas vestidas con manteles estampados con cuadros vichy azules y decoradas con centros de hortensias en la misma gama de azul y limones dispuestos en jarrones transparentes. Las sillas eran de bambú con una clara inspiración country chic, apoyada con los bajoplatos de rafia a juego con los platos de pan y cubiertos en tonos arena nacarados. De la decoración floral se encargó Floreale, que forma parte de las floristas favoritas de la jet y son conocidas de la familia Preysler, ya que fueron las encargadas de las flores del palacio El Rincón en la boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva.

Para que todo estuviera impecable, Ana Boyer y Fernando Verdasco confiaron en el buen hacer como organizadora de eventos de Moira Reyes. Moira es hermana de Cristina Reyes, la estilista de cabecera de Isabel Preysler y de sus hijas Tamara y Ana, además de haber vestido a un sinfín de famosas como Margarita Vargas o Lourdes Montes.

El regalo de sus padres y una sorpresa

El menú consistió en una barbacoa, además de pasta 'alla rueda', es decir pasta servida dentro de un gran queso. El plato fuerte fueron los postres, ya que los anfitriones confeccionaron un bufé en el que combinaron las exquisitas tartas de queso de Alex Cordobés con tartas variadas de Balbisiana. Como broche final hubo copas, tequila y una sorpresa para Fernando Verdasco: la presencia de unos mariachis que animaron la celebración.

Poco se sabe de los invitados pues tanto Fernando Verdasco como Ana Boyer son bastante discretos. Sí estaba presente la familia del tenista, con la que siempre ha estado muy unido. Sus padres, José Verdasco y Olga Moreno, así como su hermana Sara Verdasco junto a su marido, Juan Carmona. El regalo de sus progenitores fue un original reloj de una marca de lujo italiana que fascinó al homenajeado, tal y como él mismo contó en sus redes sociales. Tampoco faltó uno de sus mejores amigos, el joyero Claudio Soliva, quien fue testigo de su boda con Ana Boyer y quien regaló las alianzas a los novios.

Su prioridad: la familia

Vestido con pantalón beis, jersey de cuello alto marrón y abrigo largo, el tenista posaba sonriente en sus redes demostrando que no le afecta el cambio de década. Junto a Ana Boyer forman una de las parejas más sólidas del panorama nacional, pues en unas semanas harán seis años de casados más los nueve que fueron pareja antes de contraer matrimonio. A caballo entre España y Qatar, la prioridad del tenista es su familia. Así se refería a ellos en un medio deportivo: “Cumpliré cuarenta años en noviembre. Mi hijo ya tendrá cuatro años y cuando empiece el colegio lo normal es que no esté viajando treinta semanas, se me haría muy duro”.

En cuanto a ingresos, Verdasco ha disfrutado de muy buen 'sueldo' siendo jugador de la ATP. El hecho de tener fijada su residencia en Qatar también le ha otorgado ciertos beneficios, aunque debe pasar allí un mínimo de 183 días para que estos se hagan efectivos. Empresarialmente tuvo Ferek Imagen, una empresa que creó en 2004 para explotar sus derechos de imagen. A finales de 2022 se desvinculó de ella a pesar de tener un activo de 1.500.000 euros, aunque es cierto que las cifras que manejaba no eran las mismas que antes de la pandemia. Otro de sus proyectos, Cocowi Brand SL, fue creada en 2020 por el tenista junto a su amigo Jaime Fernández Lerga. En el registro ya no aparece su nombre; pero las gorras, trajes de baño y camisetas con el distintivo de la fruta siguen luciéndolos él y todos sus conocidos, por lo que, aunque sea de distinto modo, sigue vinculado a la misma. Además de ser uno de los modelos que aparecen en su página web.

Desde el covid y sus lesiones de rodilla y codo, su vida como tenista se ralentizó. Ahora prioriza jugando los torneos a los que tiene cariño, quizás a modo de una despedida que no tardará en llegar. Unos torneos en los que siempre le acompaña Ana Boyer y en muchas ocasiones también sus pequeños. Una familia que, según admitió el propio tenista a Bertín Osborne, le gustaría aumentar con la llegada de un tercer hijo, y si fuera niña mejor. Quizás ya sabemos cuál fue el deseo que pidió Verdasco al soplar las velas de su cuarenta cumpleaños.