Entre el Bernabéu y sus amistades: el día a día de Nuria González cuatro meses después de la muerte de Tapias

La vida de Nuria González está centrada en sus hijos, Iván y Alma, tras la muerte de Fernando Fernández Tapias el pasado 25 de octubre. A pesar de recibir invitaciones de las convocatorias más importantes de firmas de lujo y de sus amistades para sacarla de casa, por ahora prefiere mantener un perfil bajo y elude esas apariciones. Prefiere organizar las reuniones a mediodía, alrededor de un cocido que se alarga hasta media tarde. Después retoma la vida más familiar con sesiones de películas compartidas en las que no suele faltar su hermana Yolanda, su madre Celinda y, a veces, también los sobrinos. Los González han estado siempre muy unidos ante las situaciones felices y también ante las grandes tragedias, como fue el accidente mortal del hijo de un hermano en febrero de 2017.

En los últimos meses ha acudido un par de veces al Qüenco de Pepa para almorzar con sus amigas, las hermanas Lapique, Maribel Yébenes o Carmen Martínez-Bordiú. El local de Pepa Muñoz era el preferido del empresario y allí era donde se celebraban los acontecimientos familiares más importantes como los cumpleaños, santos y fiestas de Navidad. Fernández Tapias tenía también su protocolo particular y muchos viernes se reunía con su grupo de siempre.

Entre estos amigos se encontraban Lalo Azcona, Enrique Cerezo, Arturo Fernández, Ruiz-Gallardón, Juan Palacio y, alguna vez y si sus otros compromisos se lo permitían, Florentino Pérez. Todos ellos leales a Nuria González, ya que la han apoyado antes determinadas situaciones duras relativas a la relación de Fernández Tapias y los hijos de sus dos matrimonios anteriores. En su día, Azcona y el presidente del Real Madrid acudieron al Juzgado de Primera Instancia número 65 de Madrid, donde se estudiaba la demanda de incapacidad presentada contra él por sus hijos mayores.

Adiós a la vida social

Aseguran los que la conocen que Nuria González no echa de menos la vida social. Lleva una existencia tranquila, con salidas los fines de semana a las fincas de sus amistades con hijos de parecida edad a los suyos. Si tienen que estudiar, se quedan en la casa familiar de Puerta de Hierro. Cuando hay un partido importante del Real Madrid en el Santiago Bernabéu, la que fuera comentarista televisiva de moda cambia la agenda dominical. La cita obligada de la familia es en el palco del equipo blanco, donde ella y sus hijos siguen recibiendo el cariño de sus directivos.

La primera salida de Nuria y sus hijos fue precisamente al estadio para estar presentes en ese primer homenaje al empresario. Habían pasado quince días del fallecimiento de Fernández Tapias. Ese día, antes del encuentro entre el Real Madrid y el Rayo Vallecano, hubo un minuto de silencio que emocionó a muchos de los presentes. Y, por supuesto, a sus hijos Iván y Alma. La hija pequeña tenía una relación muy intensa con su padre y, al ver cómo le rendían homenaje, se puso a llorar.

El domingo pasado mantuvieron la tradición y los tres asistieron al partido del equipo de Florentino Pérez, que jugaba contra el Sevilla y salió victorioso 1-0. Respecto a los temas legales que afectan a los hijos del primer matrimonio relativo a la herencia y a otras cuestiones y reclamaciones, siguen su curso. Algunas de ellas no se han paralizado con la muerte del empresario ya que fue él mismo quien decidió pleitear.