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La gran herencia inmobiliaria de Silvia Tortosa: su mansión de Puerta de Hierro
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La gran herencia inmobiliaria de Silvia Tortosa: su mansión de Puerta de Hierro

La actriz catalana ha fallecido este fin de semana a los 77 años sin herederos. Tenía un buen patrimonio inmobiliario, encabezado por su casa de Madrid

Foto: Silvia Tortosa. (Europa Press)
Silvia Tortosa. (Europa Press)

En los años 70, empezó a florecer en la zona cercana a la Puerta de Hierro madrileña una urbanización donde las grandes fortunas tenían acceso casi inmediato al centro de Madrid, pero sin los agobios de la gran ciudad. Muy cerca del monte de El Pardo, la zona se convirtió muy pronto en sinónimo de salud financiera. Allí se establecieron los condes de Barcelona, la infanta Pilar, el presidente argentino Juan Domingo Perón durante los años de su exilio en España y, mucho más tarde, una de sus vecinas más ilustres, Isabel Preysler.

También fue el lugar en el que la actriz Silvia Tortosa decidió invertir gran parte de su patrimonio. La catalana, que vivía de las rentas que le generaban varios pisos alquilados en Barcelona, contaba con un chalet esquinero en este lugar privilegiado de la capital, muy cerca por cierto de la famosa residencia de la 'socialite' filipina. Ha sido en la hora de su muerte cuando medios como 'El Español' o 'La Razón' han sacado a la luz esta mansión, que se ha convertido en la joya de su caudal hereditario. Recordemos que Tortosa ha fallecido sin herederos.

placeholder Silvia Tortosa, en una imagen de archivo. (Europa Press)
Silvia Tortosa, en una imagen de archivo. (Europa Press)

Se trata de una casa de cuatro plantas, jardín y piscina, con casi cuatrocientos metros cuadrados de superficie. En la planta baja se dispuso un apartamento perfectamente equipado en el que vivió una temporada la madre de la última pareja sentimental de la actriz, Carlos Cánovas.

placeholder Chelo García Cortés, en el último adiós a Tortosa.
Chelo García Cortés, en el último adiós a Tortosa.

En el año 2007, la actriz recibió al suplemento 'Su Vivienda' en esta casa de Puerta de Hierro, y les explicó las razones por las que la había adquirido: el barrio, la orientación y la superficie. "Todo lo demás es cambiable", explicaba. A Tortosa le gustaban las casas grandes, "como a todo el mundo", y se la pudo permitir "con mucho trabajo y ahorrando siempre, como una hormiguita y como buena catalana que soy". "Tener espacio para disfrutarlo me parece importante, para estar a gusto y para disfrutar de él con tu gente, que es lo más importante. Yo no soy muy de salir, prefiero que vengan mis amigos a casa", decía.

placeholder José Manuel Parada y Carlos Cánovas, en el entierro de Silvia Tortosa. (Europa Press)
José Manuel Parada y Carlos Cánovas, en el entierro de Silvia Tortosa. (Europa Press)

A lo largo de su vida, debido a su profesión o a su trayectoria personal, Tortosa vivió en más de una docena de casas diferentes: Barcelona, Madrid, Londres, Washington, Baltimore, Maryland, Miami Beach y por último Madrid. La catalana contaba entonces también con "un chalet en Miami" a medias con su exmarido.

Una casa como la de Silvia Tortosa en Puerta de Hierro puede superar en el mercado inmobiliario los dos millones de euros, explica un experto en el sector inmobiliario de alta gama, "aunque depende del estado de conservación de la vivienda". La mansión solo tendría una cosa en contra, y es que hace tiempo que Puerta de Hierro perdió la partida contra La Finca y La Moraleja, los dos referentes del sector 'prime' y 'super prime' de las afueras de la capital.

En los años 70, empezó a florecer en la zona cercana a la Puerta de Hierro madrileña una urbanización donde las grandes fortunas tenían acceso casi inmediato al centro de Madrid, pero sin los agobios de la gran ciudad. Muy cerca del monte de El Pardo, la zona se convirtió muy pronto en sinónimo de salud financiera. Allí se establecieron los condes de Barcelona, la infanta Pilar, el presidente argentino Juan Domingo Perón durante los años de su exilio en España y, mucho más tarde, una de sus vecinas más ilustres, Isabel Preysler.

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