Tamara Falcó borra esta fotografía con Íñigo Onieva de su perfil de Instagram
Tamara Falcó se arrepiente de una instantánea subida a sus redes sociales y la elimina de su perfil
Tamara Falcó regresó hace unas semanas a España después de unas idílicas vacaciones en el océano Índico. Primero fueron las Maldivas y luego las Seychelles; unos destinos de los que la aristócrata presumía a través de diversas publicaciones en su perfil de Instagram, donde reúne a más de 1,6 millones de seguidores.
Sin embargo, hay una fotografía que Falcó ha preferido eliminar de su álbum de recuerdos online. En ella, aparece Tamara y su marido, Íñigo Onieva, con unos looks poco convencionales.
En la imagen, la hija de Isabel Preysler lucía un vestido midi blanco con escote barco y la parte del top fruncida, mientras que la falda tenía dos filas de volantes en la parte inferior. Un conjunto que la diseñadora de moda complementaba con un pañuelo negro de topos blancos en la cabeza y un pequeño bolso de mano.
Por su parte, Onieva optaba por unos pantalones en verde oliva y una camisa de manga larga con un estampado vintage muy particular. El estilismo de Íñigo llama bastante la atención por un aspecto con el que no estamos acostumbrados a verlo: con el pelo totalmente engominado hacia atrás, el empresario lleva unas gafas translúcidas y también unos pendientes largos.
Esta mañana el programa ‘Aruseros’ también se hacía eco de la instantánea. “Yo pensaba que era [Jaime de] Marichalar”, expresaba Alfonso Arús en tono cómico durante la emisión.
La fotografía fue subida durante la tarde-noche de ayer, en una fiesta organizada por su amiga, Luisa Bergel, a la que en ocasiones se refiere como “mi hermanita”. Y es que la amistad entre ambas es tan grande que la influencer pidió a Onieva y a la marquesa de Griñón que fueran testigos el día de su boda con Cristian Flórez, en agosto del año pasado.
Tamara Falcó regresó hace unas semanas a España después de unas idílicas vacaciones en el océano Índico. Primero fueron las Maldivas y luego las Seychelles; unos destinos de los que la aristócrata presumía a través de diversas publicaciones en su perfil de Instagram, donde reúne a más de 1,6 millones de seguidores.