El día a día de Rubiales ante el estreno de 'Se acabó': compras por el centro y sin propiedades a su nombre en Granada

20 de agosto de 2023. España, país futbolero por antonomasia, vibra con la victoria del equipo español en la celebración del Mundial femenino de fútbol. Un gesto del presidente de la Real Federación Española de Fútbol da un significativo beso a la capitana, Jenni Hermoso. Le coge la cara con las dos manos y le planta sus labios en los suyos. Aunque su reacción inicial es la de llamar "idiotas, estúpidos y tontos del culo" a los que critican un beso no consentido, pocos días después admite haberse equivocado. El 23 de agosto, la propia jugadora condena el hecho y exige responsabilidades. El 10 de septiembre, Rubiales acabará dimitiendo de su cargo.

Esa cronología forma parte del documental que llega este fin de semana a Netflix. 'Se acabó: Diario de las campeonas'. Según reza la sipnopsis, estamos ante la historia de "las futbolistas de la selección española", que se reúnen "por primera vez para revivir el turbulento Mundial femenino de 2023 y el beso que ensombreció su victoria". Es decir, el nombre de Rubiales sale a colación en no pocas ocasiones. Pero, ¿qué ha sido del que fuese presidente de la RFEF?

En septiembre de 2023, nuestros compañeros de 'El Confidencial' publicaban, en exclusiva, que el que fuese pope del fútbol español había puesto en venta su ático de lujo en la calle Ferraz de Madrid. El precio, al alcance de pocos bolsillos, era de 2.550.000 euros, tal y como se podía comprobar en los portales inmobiliarios Idealista y Yaencontre. Medio millón más de lo que estimó el informe de la tasadora que obra en el sumario del caso de los Supercopa Files, que había fijado el coste de la vivienda en dos millones cuando el dirigente pidió la hipoteca.

Hoy por hoy, y según ha publicado la prensa local granadina, Rubiales aguarda en la morisca ciudad de su vida, las cuentas pendientes que le aguardan con la justicia. Intenta estar tranquilo y pasar desapercibido tras el ruido y la furia que acompañaron su caso. El juicio al que se enfrenta comenzará el 3 de febrero de 2025 y, si todo sale según lo previsto, finalizará el 19 de ese mes. Rubiales se enfrenta la petición de la Fiscalía de dos años y medio de prisión para él. Uno por el beso, presuntamente considerado delito de agresión sexual, y otro año y medio por las presuntas coacciones ulteriores a Jenni Hermoso. Diferentes medios publicaron también la zona concreta en la que vive ahora el exfutbolista: la céntrica calle Reyes Católicos, identificada por los turistas por albergar la estatua de Colón a los pies de la mismísima Isabel la Católica. Incluso se ha dicho que compró un piso allí por medio millón de euros.

Vanitatis ha podido comprobar, sin embargo, que no existe propiedad alguna a nombre de Luis Rubiales en la ciudad de la Alhambra. Por lo tanto, solo existen dos opciones: que el inmueble que habita esté a nombre de otro familiar o que se trate, simplemente, de un alquiler. Fuentes solventes nos aclaran también que no es muy difícil ver al hombre más polémico de la España de 2023 en los alrededores de su nuevo hogar.

'El País' publicó algunos de los locales de los que suele ser asiduo: la famosa heladería 'Los Italianos', todo un icono para los granadinos, o una decana pastelería situada en la propia calle Reyes Católicos. Testigos de su día a día cuentan a este medio que también se le ha visto de compras en comercios muy concurridos de la capital, como el 'Cortefiel' situado en la esquina de Gran Vía con RRCC. El juicio o la opinión de aquellos que se cruzan con él sigue siendo el mismo si se les pregunta: Rubiales es un hombre "simpático que no llama para nada la atención", algo irónico si tenemos encuenta que durante bastantes meses fue el protagonista absoluto de la actualidad y de esas mesas de debate televisivas cada vez más habituales (y más ruidosas).

Nunca asiste (aunque "le encantaría") a partidos del Granada y trata de que la marea que lo barrió hace poco más de un año se calme un poco. Al fin y al cabo, poco después de las próximas Navidades volverá a convertirse en indeseado protagonista de la actualidad y de los tribunales. Es toda una incógnita si, en la intimidad de su salón, verá el documental de Netflix en el que su nombre sale, inevitablemente, de la cueva del olvido. Joanna Pardos, su directora, explica en la nota de prensa de la plataforma que “las jugadoras relatan lo vivido en el último año desde un lugar donde no lo habían hecho nunca antes. Es la primera vez que muchas hablan de esto. Es un privilegio contar con testimonios tan personales de un hito que ha marcado un antes y un después en la historia deportiva y social de nuestro país”.

En cualquier caso, Rubiales ha apostado por un casi anonimato que hace que incluso sus propios convecinos vivan con total naturalidad sus compras, sus visitas a comercios o algún que otro paseo en el que el símbolo negativo del 'Me Too' español (Iñigo Errejón, calienta que sales) solo trata de ser uno más.