Así es el la casa del rockero Leiva en la sierra de Gredos: un refugio de 800m en plena naturaleza

Madrid ciudad es muy bonita, preciosa, lo tiene todo. La vida, las calles, la sangre, los ruidos, el rock. Tiene tantas cosas que no siempre es apta para espíritus sensibles, aunque estos vengan en envoltorio de chupa de cuero. El cantante Leiva, que estos días está presentando su nuevo trabajo, 'Gigante', es una de esas personas que tiene pinta de llegar derrapando a la ciudad cada noche y, sin embargo, vive tranquilamente en un piso en las afueras y tiene un refugio 'secreto' en una pequeña localidad de la frontera entre Madrid y Toledo.

Adquirió esa casa en las vacas gordas, en el año 2006, cuando su carrera con Pereza estaba en lo más alto. "Hasta el tercer disco no pudimos vivir de la música, hacíamos sesenta conciertos y lo que sacábamos me daba para pagar al equipo. Yo vivía en casa de mis padres". Pero en 2005 sacaron 'Animales', el trabajo que disparó su carrera, y con los réditos el rockero decidió invertir en una casa en una pequeña localidad enmarcada por la sierra de Gredos, en la frontera con Toledo y abrazada por el río Alberche. Allí pasa sus momentos de tranquilidad.

El compositor posee en la zona un terreno de 800 metros cuadrados donde tiene una casa con garaje, piscina y un lugar para disfrutar del campo, por insospechado que les parezca. El cantante se ha declarado a menudo amante de la vida tranquila y relajada, le gusta dar largos paseos con su perro por la zona del Gurugú, las estribaciones de la sierra de Gredos o por la ribera del Alberche, donde las playas fluviales forman paisajes idílicos. La zona queda no muy lejos, además, del pantano de San Juan, donde otros famosos (el último, el entrenador del Real Madrid, Zinedine Zidane) tienen también su segunda residencia.

A diferencia del pantano, sin embargo, los precios no son astronómicos. Casas similares a la de Leiva no superan los 200.000 euros en los portales inmobiliarios más conocidos. El rockero ha revelado estos días que está de promoción que se ha convertido en un consumado hortelano y que podría vivir de las verduras que recoge en la huerta de su casa.

Esta casa no es la única propiedad inmobiliaria del compositor, que ganó mucho dinero en su etapa con Pereza, aunque luego perdió parte de esos ahorros cuando el grupo decidió separarse y emprendió una nueva etapa profesional en solitario. "El año de la separación de Pereza fue económicamente ruinoso", reconoció en una larga y honesta entrevista con 'Jot Down'. Volvió a tocar en cruceros para poder "tapar agujeros". Eso, después de haber llenado los grandes aforos junto a Rubén Pozo, su compañero en Pereza.

En Alameda de Osuna, el barrio madrileño donde se crió, el cantante contaba con un ático dúplex de 210 metros cuadrados repartidos en dos plantas. La casa se hizo famosa cuando la prensa descubrió que el cantante la había puesto a la venta como un mortal más, en Idealista. El precio era de 585.000 euros. Al venderla, adquirió otra propiedad en el mismo barrio, un chalé.