Así era la gran casa familiar de Miguel Bosé: de su ubicación de lujo a su decoración y un millonario comprador

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Lo rememoraba Lolita Flores en el documental 'Bosé Renacido': "Estaban desde los gitanos de todos los tablaos flamencos hasta la jet set más exclusiva, toreros, cantantes, futbolistas...". Ernest Hemingway hizo eterno aquello de que 'París era una fiesta', pero quizás porque todavía no había visitado la casa de Lucía Bosé y Luis Miguel Dominguín en Madrid, como sí haría años después.

Una casa de aire racionalista, siguiendo la pasión por el hormigón de la época, situada en la lujosa urbanización de Somosaguas, en la también lujosa localidad de Pozuelo de Alarcón, cerca de Madrid. Más de 1.000 m² construidos, con 10.000 m² de terreno, donde recibieron a famosos como el mencionado escritor estadounidense, a Lola Flores, Audrey Hepburn, Pablo Picasso, íntimo de la familia, o a Salvador Dalí. Una icónica residencia, como después lo sería la casa azul de Lucía Bosé.

Un gran chalet familiar construido en 1958, denominado "Villa Paz" por la prensa de la época, que no solo era epicentro de la gente VIP de la época. La pareja formada por Luis Miguel Dominguín y Lucía Bosé se desmoronaba. Más allá de su complicada relación sentimental, la realidad es que tras la separación la actriz italiana se quedó con la casa, cuenta la leyenda que bajo amenaza con pistola, para residir junto a sus tres hijos.

Un espacio que fue muy popular durante unos años, con esas visitas de renombre, pero que después pasó a ser un búnker blindado, ya bajo la propiedad de Miguel Bosé. De hecho, en una de las pocas ocasiones en las que la prensa pudo tener acceso a su casa, la revista 'Vanity Fair' destacaba el interior de este hogar como un espacio "diáfano, cálido, compuesto por distintos ambientes nada minimalistas, llenos de libros organizados por categorías".

La casa de Miguel Bosé en Madrid

A lo que sumaban los llamativos detalles decorativos con máscaras africanas, cerámica, incluyendo los platos o jarrones pintados por Picasso, muchos cuadros y piezas taurinas, recuerdo de ese pasado de Luis Miguel Dominguín. Así, frente al exterior de líneas rectas, con piedra, hormigón y grandes ventanales, el interior destacaba como una casa muy vivida, llena de recuerdos. Aunque el artista la reformó tras comprársela a su madre.

Un hogar del que Miguel Bosé dio ciertas pinceladas en su docuserie para Movistar +, 'Bosé Renacido', explicando que para él "era todo". "La diferencia entre Miguel y Bosé la marca precisamente la frontera que es la puerta de esta casa", aseguró también en 'Vanity Fair'. Sin embargo, en ese mismo 2023 se confirmó que tuvo que deshacerse de ella.

Aunque la gran mansión de los Dominguín-Bosé en Somosaguas siguió en manos de un ilustre famoso, que quizás habría sido invitado a esas míticas fiestas de los años 60. La revista 'Semana' desveló en marzo de 2023 que la vivienda había sido vendida en octubre de 2022 al futbolista belga Thibaut Courtois, portero del Real Madrid, por 6 millones de euros. Un precio que demuestra la joya inmobiliaria que es esta propiedad.