Esther Koplowitz saca del ostracismo al empresario Gonzalo Hinojosa (Cortefiel) en un emotivo encuentro con los mayores

Cuando Esther Koplowitz se mira al espejo de su popularidad, no siempre lo que ve se corresponde con la realidad. Con una imagen muy cuidada y escasas apariciones públicas al margen de lo estrictamente obligatorio, la vicepresidenta primera del conglomerado FCC que ahora preside su hija Esther Alcocer ha construido una coraza pública, aunque en realidad lleva una vida ajena a las candilejas. De hecho, por su labor en la Fundación Esther Koplowitz ha recibido varios reconocimientos, destacando la Medalla de Honor de la Real Academia Nacional de Medicina (RANME) y la Medalla de Oro al Mérito al Trabajo. Galardones que han reconocido su labor filantrópica y la contribución de su fundación a la medicina y la investigación biomédica. El pasado mes de febrero ingresó junto a la exministra Ana Pastor en el patronato de la Academia de Medicina a propuesta de la junta directiva.

La Fundación que lidera no solo se centra en la investigación biomédica (el Centro Esther Koplowitz en Barcelona o el robot Da Vinci del Clínico de Madrid son muestra de ello), también tiene programas de educación y cultura y colabora con otros organismos similares en proyectos puntuales. Pero si hay una actividad en la que Koplowitz y sus hijas se han implicado personalmente, es en la obra social, encarnada, entre otros proyectos, en varias residencias de ancianos. Lo saben bien los mayores que viven en Nuestra Casa, en Collado Villalba, un hogar que construyó la Fundación y que gestiona la Comunidad de Madrid desde 2001, pero donde están muy acostumbrados a ver a Esther y sus hijas en su faceta más natural.

Es habitual ver a la empresaria, a alguna de sus hijas o a los altos directivos de FCC pasar por allí los viernes, cuando organizan Los Viernes de la Residencia, unas jornadas en las que un personaje de interés da una charla sobre su trayectoria. Incluso la presidenta actual de FCC, Esther Alcocer Koplowitz, suele sacar hueco esos días que se han convertido en momentos muy especiales para la familia.

Hace unos días, el centro de Collado Villalba vivió una jornada especialmente emotiva con la visita del empresario Gonzalo Hinojosa, fundador del Grupo Cortefiel y una de las figuras más influyentes del panorama empresarial español. Alérgico a la exposición pública desde que la familia vendió el grupo a varios fondos de inversión por 1.400 millones de euros, su apellido volvió a la prensa hace unos días cuando se reveló que una de sus sobrinas, Gabriela Hinojosa, era concursante de 'MasterChef'.

Durante el evento, los mayores residentes de la Fundación tuvieron la oportunidad de conocer de cerca la trayectoria personal y profesional del reconocido empresario, quien compartió vivencias, anécdotas y lecciones aprendidas a lo largo de su carrera. Su testimonio fue recibido con interés y admiración por los asistentes.

La jornada, cargada de emoción y cercanía, fue además amenizada por una actuación del dúo flamenco compuesto por Juan de Badajoz y Antonio Reyes, quienes pusieron el broche artístico a un día que quedará en el recuerdo de todos los presentes. Tal fue la emoción que hasta Esther Koplowitz se arrancó a bailar flamenco, como atestigua el vídeo compartido por la Fundación Esther Koplowitz en sus redes sociales. Los residentes están acostumbrados porque no es la primera vez que sucede. Junto a Esther, también estaba su hija Alicia Alcocer.

Desde la Fundación, han calificado la visita como “un día inolvidable” tanto para los mayores como para el equipo humano que les acompaña en su día a día. El encuentro refleja el compromiso de la entidad con la creación de espacios de inspiración, convivencia y enriquecimiento personal para sus residentes.