La empresaria Blanca Cusiné rompe su silencio sobre su relación con un jugador del Barça: de las feroces críticas a verse casi obligada a ser madre

La historia de los futbolistas del Barça, en muchos casos, va más allá del deporte. Si bien la historia entre Pique y Shakira colmó titulares durante su separación, se desconocía que otra de las historias de amor del club blaugrana había también vivido momentos agónicos. Se trata del jugador Bojan Krkic y Blanca Cusiné Morell. Ella es licenciada en Ingeniería Industrial y una pieza fundamental en la expansión internacional de Arcusin, una empresa especializada en la fabricación de maquinaria agrícola.

Sin embargo, pese a su exitosa trayectoria, la vida personal de Cusiné estuvo marcada por su relación. El culé y ella se conocieron cuando ambos tenían tan solo seis años en un colegio de Mollerussa, localidad leridana. Sin embargo, no fue hasta años más tarde cuando retomaron su relación. “Él se fue a vivir a Barcelona y perdimos un poco el contacto. Mi padre, como nos encantaba el fútbol, compramos 3 asientos en el Camp Nou y él tenía los de detrás. Entonces, en cada partido, yo iba para verle”, confesaba.

La empresaria relató la admiración profunda que sentía por él, incluso prediciendo que algún día jugaría en el Barça. Pese a que Bojan consiguió cumplir dicho sueño, tras su primer año, “lo paso muy mal en el vestuario”. Se trata de la Eurocopa de 2008, cuando el jugador fue convocado por Luis Aragonés a participar, pero él renunció alegando problemas de salud mental.

“Dijo que no porque estaba con problemas de ansiedad derivados de la presión, pero no se sabía. Nos fuimos a Formentera y sacaron fotos en ‘Lecturas’ en el mes de septiembre. Me escribe mi madre cuando estaba en una clase de Ingeniería y me dice: ‘Blanca, sales en una revista y no apareces muy bien”, explicó. A partir de ese momento, “empezaron las críticas y recibía cada día 100 mensajes de que yo era muy fea, con mi nariz o mi culo”.

Una situación que le provocó a Blanca inseguridades y le generó comparaciones con otras novias de futbolistas. “Me tocó mucho la autoestima, hasta el punto de no salir a la calle, a ir con él”, describió y aprovecho para aclarar que ese contexto fue un punto de inflexión en su relación con Bojan. “Se centró mucho en su carrera y priorizó el fútbol”, puntualizaba.

Entre los episodios que hicieron escalar el conflicto, Blanca subraya cuando unos coaches que le sentaron un día para firmar “un contrato de la MLS en Canadá”, refiriéndose a la liga americana de fútbol. Según su testimonio, le sugirieron “crear una familia y dejar el trabajo” debido a que ya tenían “cierta edad”. Justo coincidió con que a Cusiné le diagnosticaron endometriosis y entre los posibles efectos, se encuentra la infertilidad. “Me dijeron: ‘Te la has autogenerado tú, porque tú en realidad quieres ser madre, pero estás trabajando tanto que no te estás centrando", admitió.

A partir de ahí, ella vio que su modelo de vida era “incompatible con la de un futbolista, donde las mujeres lo sacrifican todo por ellos”. Es la primera vez que Blanca Cusiné ha relatado este duro episodio, el cual pudo suponer un contratiempo a lo que le vendría. Su éxito ha sido labrado con mucho esfuerzo, incluso trabajando en Francia durante 3 años para la familia Mulliez, dueña de Alcampo, Decathlon y Leroy Merlin. “Pensaba que nunca sería suficiente, pero esto es lo que me ha hecho avanzar, trabajar más rápido y formarme más”, concluye.