Ricky Rubio se abre en 'Lo de Évole' sobre los peores momentos de su vida: "Parece que me muero y que mi vida no tiene sentido"

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A lo largo de los últimos cinco años, Jordi Évole ha logrado mantener el éxito de su programa de televisión (lo que nunca es fácil), pero sobre todo ha logrado entrevistas muy personales con todo tipo de invitados. De su encuentro con el recientemente fallecido Pepe Mujica a los deseos de paternidad de Dani Martín o las grandes confesiones de Lolita, 'Lo de Évole' nos permite conocer diferentes ángulos de los famosos.

Así lo ha vuelto a demostrar en su entrevista a Ricky Rubio, donde el jugador de baloncesto ha querido hablar de la presión del deporte de élite, la fama siendo joven, los problemas de salud mental o el fallecimiento de su madre. Unas confesiones donde ha mostrado su faceta más vulnerable, buscando concienciar sobre la importancia de cuidar el cuerpo, pero también la mente. Una entrevista que asegura que será la última porque no quiere "ser el foco".

Un encuentro con Jordi Évole donde se ha mostrado muy crítico con el peso que se pone en ciertos deportistas, cuando todavía son niños, como él mismo vivió. "Vende muchos titulares, pero hay una persona detrás. Alguien, con 14 años, el cerebro no lo tiene desarrollado. Si se habla mucho, alguien con 14 años no tendría que estar en ese foco por mucho que lo haga bien. No está preparado para vivir este mundo que puede ser caníbal. Tienes que tener unas bases desde el inicio para soportar eso".

Además, ha hablado del síndrome del impostor y de su depresión: "Acabo con la idea de que soy un farsante, una vez más". Diferentes momentos difíciles a lo largo de larga trayectoria que le llevaron a tener que frenar en la concentración del Mundial de Baloncesto de 2023: "Una noche que estaba en el hotel dije 'no quiero seguir, ya no con el baloncesto, con la vida'. Tengo una familia, tengo un hijo, pero me sentí así por un segundo".

"Hay un momento donde todo te pesa tanto"

Un pensamiento que le hizo entrar en alerta: "Dije, ojo, aquí algo te está tomando el control de ti mismo. Puedo entender a mucha gente, tanto que está en el momento de éxito como, por desgracia, muchos que se han quitado la vida como a gente normal que dice que no puede seguir. Hay un momento donde todo te pesa tanto. En el Mundial, cuando digo que paro, parece que me muero y que mi vida no tiene sentido", ha añadido.

Una entrevista donde también ha hablado de cómo le afectó la pérdida de su madre y vivir su enfermedad desde lejos, ya que entonces jugaba en Estados Unidos: "Le detectan cáncer en el 2012 y está tres o cuatro años con tratamientos. El último año, en la temporada 15-16, estoy muy jodido. Yo salía del coche y llamaba a mi madre. En el 2015 empiezan a ir las cosas muy mal y ella no quiere que lo vea, pero me colgaba porque tenía que vomitar".

Por ello, regresaba a España siempre que tenía un día libre, y pudo acompañar a su madre en la última etapa de su enfermedad: "Yo creo que mi madre me esperó. Llegué a finales de abril y estuve cuatro o cinco semanas con ella. Si no me llega a esperar, yo creo que no me lo perdono nunca". Unos años muy complicados para Ricky Rubio, tras los que sigue trabajando para recuperarse.