El orgullo de Alejandra Silva por el último premio a Richard Gere con el que hace historia: “Un beso puede cambiar el mundo”

Alejandra Silvia tiene muchas razones por las que estar orgullosa de su marido, Richard Gere. Una de ellas es su carrera como actor, que le ha dado la fama mundial de la que presume. Pero si algo bueno ha traído este reconocimiento a la vida de Gere es la posibilidad de poner en marcha su propia Fundación. Un trabajo de activismo que acaba de ser premiado en la ciudad de Nueva York por la Organización Human Right First (HRF).

Gere se ha convertido en el primer galardonado con el premio Visionario en los Premios Human Rights First 2025. La organización ha querido premiar por dedicar el altavoz que le ha dado su traductor profesional a “la defensa de los derechos y la dignidad de las personas oprimidas en todo el mundo” a través de su fundación, la Fundación Gere, creada en 1991. 

“Durante décadas, Gere contra el VIH/SIDA y ha defendido los derechos de las personas indígenas, los refugiados vulnerables, las personas sin hogar y la respuesta a las crisis humanitarias”, destacando por encima de todo su “firme defensa de los derechos humanos de los tibetanos, ejemplificada por su presidencia de la Campaña Internacional por el Tíbet y la cofundación de Tibet House US, ha moldeado la política bipartidista estadounidense e internacional y ha frustrado los intentos del Partido Comunista Chino de apropiarse de la cultura tibetana”.

Un premio que recogió bajo la atenta mirada de su mujer, Alejandra Silva, en la Gran Manzana. Reconocido también por su discreción a la hora de presumir de su labor social, ha sido la gallega la que ha compartido un bonito vídeo de este día tan especial en sus redes sociales en las que un romántico beso de la pareja es el punto de partida a sus palabras de orgullo.

“Un beso puede cambiar el mundo. Porque todo cambio empieza en lo pequeño. En un gesto, en una caricia, un abrazo, en la forma en que miramos al otro. Un beso puede transformar la voluntad, despertar una conciencia, recordarnos que lo humano, eso que todos llevamos dentro, sigue siendo la fuerza más poderosa para cambiar el mundo”, escribió Silva.

“Enhorabuena, mi amor, por este merecido premio por tu vida de inquebrantable dedicación a la defensa de los Derechos Humanos y tu compromiso con las causas humanitarias”, le decía, llena de orgullo, a su marido.

Una labor que también destacó Uzra Zeya, presidenta y directora ejecutiva de Human Rights First: “Richard Gere encarna el espíritu del arte al servicio de la justicia. Su compromiso de toda la vida con la prioridad de los derechos humanos demuestra el poder transformador de la excelencia artística al decir la verdad al poder y movilizar una solidaridad global que trasciende las fronteras físicas e ideológicas”.