The Hall, ven cuando quieras

The Hall, es un nuevo espacio abierto dividido en distintos ambientes, con un horario ininterrumpido de cocina y una oferta gastronómica muy heterogénea, concebido por Benjamín Calles, bajo la filosofía de que “es el cliente el que elige, cuando quiere venir” (abierto de 09:00 a 02:00 todos los días)

Un espacio diferente que hace referencia al punto de encuentro de cualquier hotel, una zona de libertad, un formato cosmopolita donde la oferta gastronómica y la de ocio se acercan a las de las grandes capitales del mundo. Versatilidad a la hora de comer, sabores reconocibles y buen servicio.

Sentarse en una mesa corrida para ver, ser visto y socializar, o un cómodo sofá con mesa baja para encuentros más informales o simplemente leer el periódico mientras tomas un café, utilizar el WiFi para trabajar y navegar, realizar una presentación informal o de trabajo (tienen pantallas) o disfrutar de la música en el afterwork con un cóctel en la mano. Su estupenda y agradable terraza interior, es uno de los sitios más concurridos con buen tiempo.

The Hall responde a una nueva manera de comer, se acabaron los horarios rígidos de cocina y con el formato de primero, segundo y postre; gracias a una configuración multiespacio, a un horario ininterrumpido de cocina y a una carta entre lo clásico y lo internacional puedes hacerlo comoy cuando quieras. Porque, como afirma Calles: “El lujo es poder elegir dónde sentarse, qué tomar y a qué hora”, “no sólo se trata de lo que está en el plato, sino de empaparse del ambiente y el espíritu del local”.

En cuanto a la carta, presenta una cocina sin complejos con una oferta muy heterogénea y cosmopolita en la que se pueden encontrar desde platos clásicos como el auténtico Villagodio, hasta propuestas internacionales como el Pollo Tikka Masala con arroz basmati, o platos de cuchara, pastas y arroces. El único recuerdo que queda ya de Nodo es el Tataki de atún con ajoblanco, una receta única que fusionó por primera vez las cocinas japonesa y mediterránea. Una revolución en los fogones que traspasó fronteras. Se cuida y mima la cocina como se puede comprobar en platos como el salmorejo de dos tomates, el gazpacho con cigalitas, un buen humus con calabaza, Baba ganoush, Vichyssoise con salmón, ensalada de endivias y queso Stilton y pez mantequilla con coliflor y soja.

Entre horas sigue funcionando la misma carta pero se puede optar por platos para picar o compartir, como la fritura de chipirones y verduras con mayonesa de lima y el fish and chips con pimentón de la Vera; o platos rápidos, como el sándwich de roastbeef. No se pueden pasar por alto sus estupendos desayunos que incluyen bollería francesa, sándwiches varios o el Full English Breakfast.

En definitiva, afirma Calles, The Hall es “mucho más que un restaurante, es un espacio abierto donde pasar el rato haciendo lo que apetezca y comiendo bien”, que los clientes puedan cumplir con el lema: ‘ven cuando quieras’.

El interiorismo ha sido concebido por el catalán Alfons Tost, que ha diseñado cinco espacios con diferentes cromatismos que logran conservar la continuidad y la sensación de espacio abierto y en el que exhiben obras de arte, lámparas de diseño y chimeneas que contribuyen a crear una atmósfera acogedora.

The Hall, C/ Velázquez, 150. Tlf: 91 564 40 44 www.thehall.es