A punto de comenzar la gran fiesta del fútbol mundial en Brasil, visitamos uno de los hoteles más emblemáticos de la capital, la Carioca y universal Río. El gran Cristo del Corcovado, acoge entre sus brazos la Cidade maravilhosa. El verde de Tijuca, el bosque urbano más grande del mundo, contrasta con el azul de la bahía y los picos de granito se erigen como impresionantes farallones y parapetos, desafiando al mismo Niemeyer.
En tranvía, sube hasta la colina del viejo barrio bohemio de Santa Teresa. Por su tranquilidad, lejos del bullicio del resto de la ciudad, artistas e intelectuales, se asentaron en este barrio. Pasea por sus calles estrechas, déjate sorprender por las fabulosas mansiones. Date un respiro, no hay prisa, en el Bar do Serginho bebe una 'cerveja' helada. Curiosea en las interesantes tiendas de artesanía de Rua do Almirante Alexandrino.
Acércate a la puesta de sol y tómate una caipiroska a la sombra de las palmeras que han plantado allí arriba, mientras comtemplas desde la terraza del hotel Santa Teresa, como el disco rojo, se pone sobre la bahía Guanabara
El restaurante del hotel, Tereze, esun Relais & Chateaux, levantado en una antigua plantación de café, con las mejores vistas sobre uno de los barrios de la ciudad, la bahía y el puente Niteroi-Río. Es sin duda el hotel con más encanto de la ciudad. Su diseño colonial y elegante y su estilo informal pero con mucha clase, le hacen uno de los más exclusivos. Su restaurante ofrece uno de los escenarios más espectaculares e impactantes para cenar. Un comedor de muebles de madera reciclada, paredes blancas y amplios ventanales con vistas a las copas de los árboles y las casas coloniales, ofrecen un tranquilo y pintoresco entorno para disfrutar de una cocina innovadora brasileña.
El chef, Damien Montecer, se formó en Cannes y Reims, en restaurantes de 3 estrellas Michelín. Viajó para probarse y formarse por Perú, Cuba, Costa Rica y Panamá; pero su cocina es eminentemente local, bahiana, inspirado en el Brasil de las tradiciones y los sabores. La materia prima con que realiza sus creaciones son principalmente de cercanía, la langosta local; la gallina de Guinea, crecida en granjas locales; o las exóticas y deliciosas frutas tropicales del Amazonas, como el ‘jambu’ o el ‘cupaçu,. los pescados, como el ‘tambaqui’, un pez parecido a la cherna, son excelentes. Para disfrutar, de verdad, pide el menú gastronómico en seis platos.
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