Los mejores pescados y mariscos en la costa vicentina
En los confines de la Europa continental se puede disfrutar de paisajes y playas idílicas y de una gastronomía a base de pescados y mariscos excelentes

Último confín de la Europa continental fue tierra de navegantes y cartógrafos de la época, conserva la Vila do Infante y la fortaleza con vistas a un horizonte que atrajo las expediciones organizadas por Don Enrique. Cerca está el Cabo de San Vicente, un rincón imprescindible para sentir un silencio solo perturbado por el viento del Atlántico y para contemplar inolvidables atardeceres.

Un paisaje de acantilados y playas que invitan a la práctica de deportes acuáticos y recorridos en bicicleta o a pie. El mar de infinitos tonos azules ofrece buenos pescados y mariscos que en bares y restaurantes saben dorar a la brasa o, bien alegrar algunos de los platos más típicos de esta región de Portugal, caldairada, una sopa de pescado con patatas, y la cataplana. Esta última es el nombre de la receta con pescado, marisco, tamboril o carne, y también de la cazuela, normalmente de cobre, con forma de esfera que se abre en dos partes para guisar los ingredientes al vapor.
El restaurante Sitio do Forno es un buen sitio para tomar la cataplana que preparan con pulpo o sardinas o el arroz tamboril, con rape, acompañado de una copa de vino y las vistas del atardecer desde el acantilado en que se encuentra, sobre la Playa do Amado, de Carrapateira. En Sagres, Mar à Vista, en la playa de Mareta, es un restaurante con una terracita sencilla que mira al mar, un salón acristalado y de madera oscura con un aire antiguo marinero que sirven buenos mariscos, como langostas y navalheiras, y pescados frescos como el sargo de la costa vicentina.

Vila Velha (Rua Patrao Antonio Faustino) es una casita con jardín y un comedor acogedor donde Lía, su propietaria y chef, es conocida por sus buenos platos vegetarianos y cocina portuguesa e internacional que acompaña de vinos portugueses, como la mayoría. Si se quiere conocer el ambiente de noche y apreciar el aire 'hippy' que envuelve Sagres, hay que ir al Bar Pau de Pita - (Rua Comandante Matoso), es un bar de copas con música en directo donde además sirven ensaladas, crepes y zumos. Otro imprescindiblee El Dromedario, (dos puertas más allá), un bistro bar con ambiente surfero que lleva 25 años animando la zona con música, cocteles, alguna especialidad italiana, platos vegetarianos y helados.

Es posible alojarse y contemplar el amanecer en una de las más famosas playas del litoral, la de Martinhal. De islotes y grutas submarinas para la práctica del buceo, frecuentada por surfistas en busca de sus olas atlánticas o para dar largos paseos por sus finas arenas doradas. En primera línea está el Martinhal Sagres Beach Family Resort Hotel. Un cinco estrellas, pbra del arquitecto británico Sir Terence Conran, integrado en un espacio natural de 42 hectáreas que miran al mar. Merece la pena comer en cualquiera de sus dos restaurantes OTerraço y As Dunas, porque son una buena muestra del buen producto local en recetas tradicionales tipicamente portuguesas aunque hay opciones internacionales y menús para niños.
Martnhal Family & Resorts Quinta do Martinhal. Sagres - Portugal www.martinhal.com