Receta de flan de queso con caramelo, un postre para chuparse los dedos
A medio camino entre el flan y la tarta de queso, este goloso postre aúna cremosidad, dulzura y un matiz salado que es lo que le da el punto irresistible
Gracias a la acción suave del baño María en el horno conseguimos que los flanes de queso adquieran una consistencia suave, aterciopelada y uniforme que se funde en la boca. Con una amplia oferta de quesos cremosos en el mercado, podemos dejar volar nuestra creatividad y utilizar un gran abanico de opciones, desde requesón hasta cremas de oveja o cabra. El caramelo aporta el contrapunto líquido que envuelve el postre y lo convierte en el favorito de la sobremesa. Tanto en molde individual como en familiar, ¡no podrás dejar de relamer la cucharilla!
Preparación: 40 min Dificultad: fácil Coste: económico Comensales: 6
Ingredientes
- 250 ml de leche condensada
- 70 ml de leche
- 2 huevos
- 200 g de queso crema
- 6 flaneras caramelizadas
Preparación
- Precalentamos el horno a 180 ºC.
- Preparamos seis flaneras individuales con caramelo.
- En un bol, mezclamos el queso crema con la leche condensada. Batimos bien con varillas para integrar los dos ingredientes.
- Incorporamos la leche, mezclamos de nuevo.
- Agregamos los huevos y volvemos a mezclar.
- Vertemos la mezcla en las flaneras individuales previamente caramelizadas.
- Preparamos un baño María, introducimos las flaneras en él y horneamos a 180 ºC durante 30 minutos, hasta que los flanes estén cuajados. Enfriamos a temperatura ambiente y refrigeramos varias horas.
- Desmoldamos y servimos acompañado de su salsa de caramelo.
El truco final
Espera a que los flanes estén muy fríos para desmoldarlos más fácilmente. Añade unas gotas de limón al caramelo de los moldes para un aporte ligeramente ácido.
Gracias a la acción suave del baño María en el horno conseguimos que los flanes de queso adquieran una consistencia suave, aterciopelada y uniforme que se funde en la boca. Con una amplia oferta de quesos cremosos en el mercado, podemos dejar volar nuestra creatividad y utilizar un gran abanico de opciones, desde requesón hasta cremas de oveja o cabra. El caramelo aporta el contrapunto líquido que envuelve el postre y lo convierte en el favorito de la sobremesa. Tanto en molde individual como en familiar, ¡no podrás dejar de relamer la cucharilla!