Galleta XL con pepitas de chocolate: un postre a lo bestia
Porque una cookie gigante nunca resulta suficiente para los más golosos, aquí va esta receta que ofrece infinidad de aderezos: desde el cacao a los frutos secos. Toma nota
Alrededor de las galletas siempre hay debate: unos las prefieren tostadas y crujientes, y otros con el centro jugoso y fundente... Con frutos secos o pasas y hasta con extra de chocolate. ¿La ventaja? Al poder hacerlas en casa con una sartén o un molde apto para el horno, quien pone el límite en cuanto al tamaño y los ingredientes eres tú. Solo necesita unos minutos de cocción que, te aseguro, ¡se harán eternos! Un delicioso olor invadirá tu cocina y te obligará a reprimir el irrefrenable impulso de abrir el horno y devorarla a medio hacer. Disfruta de su interior esponjoso y de las pepitas de chocolate fundido. Resultan irresistibles acompañadas de una bola de helado o mojadas en un gran vaso de leche con el desayuno o la merienda.
Preparación: 30 minutos Dificultad: fácil Coste: económico Comensales: 2
Ingredientes
- 75 g de mantequilla en pomada
- 50 g de panela
- 100 g de azúcar
- 1 huevo
- 1 cucharadita de esencia vainilla
- 150 g de harina
- ½ cucharadita de bicarbonato
- ½ cucharadita de sal
- 150 g de pepitas de chocolate
Elaboración
- Precalienta el horno a 180º.
- En un bol remueve la mantequilla con los dos tipos de azúcar hasta que quede una crema suave.
- Incorpora el huevo y mezcla bien.
- Añade entonces la esencia de vainilla, el bicarbonato y una cucharadita de sal. Remueve de nuevo.
- Tamiza entonces la harina sobre la mezcla e incorpórala bien con una cuchara. Añade por último las pepitas de chocolate, repartiéndolas por toda la masa.
- Vierte esta mezcla en una sartén apta para el horno o un molde de 25 centímetros de diámetro y alisa la superficie.
- Hornea de 18 a 20 minutos y deja reposar la galleta otros cinco fuera del horno... siempre y cuando seas capaz de resistirte a la espera.
El toque final
El uso de la panela en esta receta le proporciona a la galleta una textura tierna y jugosa, se puede sustituir por azúcar moreno y reducir el tiempo de cocción dos minutos.
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Alrededor de las galletas siempre hay debate: unos las prefieren tostadas y crujientes, y otros con el centro jugoso y fundente... Con frutos secos o pasas y hasta con extra de chocolate. ¿La ventaja? Al poder hacerlas en casa con una sartén o un molde apto para el horno, quien pone el límite en cuanto al tamaño y los ingredientes eres tú. Solo necesita unos minutos de cocción que, te aseguro, ¡se harán eternos! Un delicioso olor invadirá tu cocina y te obligará a reprimir el irrefrenable impulso de abrir el horno y devorarla a medio hacer. Disfruta de su interior esponjoso y de las pepitas de chocolate fundido. Resultan irresistibles acompañadas de una bola de helado o mojadas en un gran vaso de leche con el desayuno o la merienda.