Desayuno de avena, coco y fruta: saludables gachas de cereales
Si nos gusta variar nuestros almuerzos y cenas, ¿por qué limitarse a desayunar siempre lo mismo? Esta propuesta incluye cereales, fruta y lácteos
El desayuno es una comida fundamental del día. Tras el ayuno de la noche, nuestro organismo necesita recargar nutrientes y energía. Los copos de avena proporcionan en buen aporte de carbohidratos complejos que junto a la fibra sacian nuestro apetito y regulan el tránsito intestinal. La fruta fresca y deshidratada, las semillas y el coco complementan la ingesta con vitaminas y grasas esenciales. Al no incorporar azúcar refinada, el índice glucémico de las gachas de avena se mantiene bajo y nos ayuda a mantener la atención durante la mañana, evitando además la tentación de picar entre horas. Una reconfortante manera de comenzar la mañana para todas las edades pero especialmente para niños y deportistas.
Preparación: 10 minutos Dificultad: fácil Coste: económico Comensales: 2
Ingredientes
- 6 cucharadas soperas de copos de avena integrales
- 1 lata de leche de coco
- 250 ml de bebida de coco
- 1 plátano
- 2 dátiles
- 50 g de arándanos frescos
- 50 g de frambuesas
- 25 g de arándanos rojos y negros deshidratados
- 25 g de semillas de calabaza y de girasol
Elaboración
- Con la ayuda de un colador separa sobre un cazo la parte densa de la leche de coco de la líquida.
- Añade la bebida de coco y seis cucharadas de copos de avena.
- Incorpora arándanos deshidratados y dátiles deshuesados y cortados en trozos pequeños.
- Cuece durante cinco minutos removiendo hasta que espese ligeramente, si te gusta una crema más suave prolonga la cocción cinco minutos más.
- Vierte la nata de coco colada en el vaso de la batidora.
- Añade la mitad de un plátano maduro, arándanos y frambuesas con la crema de coco.
- Tritura hasta conseguir una crema lisa.
- Dispón las gachas de avena en un cuenco, cúbrelas con la crema de coco.
- Decora con rodajas de plátano, frambuesas, arándanos frescos y semillas de calabaza y girasol.
El truco final
Puedes variar tu desayuno utilizando copos de distintos cereales para esta receta como trigo sarraceno, quinoa, teff… y leche vegetal o de vaca en lugar de bebida de coco.
El desayuno es una comida fundamental del día. Tras el ayuno de la noche, nuestro organismo necesita recargar nutrientes y energía. Los copos de avena proporcionan en buen aporte de carbohidratos complejos que junto a la fibra sacian nuestro apetito y regulan el tránsito intestinal. La fruta fresca y deshidratada, las semillas y el coco complementan la ingesta con vitaminas y grasas esenciales. Al no incorporar azúcar refinada, el índice glucémico de las gachas de avena se mantiene bajo y nos ayuda a mantener la atención durante la mañana, evitando además la tentación de picar entre horas. Una reconfortante manera de comenzar la mañana para todas las edades pero especialmente para niños y deportistas.