Cómo preparar un Negroni y otros dos cócteles de moda

Hacer buenos cócteles no es muy difícil, aunque hay algunas reglas que hay que cumplir para triunfar. La fundamental que se debe respetar es seguir las proporciones de las bebidas, pero también ayuda un buen manejo de las copas, los hielos y, sobre todo, seleccionar destilados de calidad.

Si eres de esas personas que disfrutan del afterwork con un buen cóctel, ahora también podrás degustar una bebida agradable sin salir de tu casa, dando un toque diferente a tus celebraciones. Para ello, hemos recopilado cómo hacer tres cócteles que ahora mismo lo están petando en los mejores bares: el Negroni, el Espresso Martini y el Moscow Mule, para que tu salón no tenga nada que envidiar a los locales de moda.

El Negroni

Desde este verano el Negroni se ha convertido en una de las bebidas más populares en los mejores bares de todo el mundo y es un clásico que está aquí para quedarse. A diferencia de otros cócteles cuyo origen se desconoce, el Negroni fue creado en 1919 en el Bar Casoni en Florencia, y fue el Conde Camillo Negroni, de aquí su peculiar nombre, quien pidió un vermut con Campari y un toque de ginebra. Desde entonces el cóctel ha sido un éxito y por ello queremos enseñarte la mejor forma de prepararlo.

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Su elaboración es sencilla, solo necesitas: 30 mililitros de Campari, 30 mililitros de ginebra, 30 mililitros de vermut rojo, piel de naranja y hielo. El primer paso es añadir todos los ingredientes a la coctelera, excepto la corteza de naranja, y mezclarlo durante unos pocos segundos. Sirve la mezcla en un vaso ancho con hielo, coloca la corteza de naranja en el borde y ¡listo!

Es una bebida fuerte y por ello, te recomendamos que lo tomes durante el aperitivo. También puedes añadirle un poco de prosseco para darle un toque más al sabor.

Espresso Martini

Este es sin duda uno de los cócteles más populares, su intenso y equilibrado sabor, y la presentación en una copa típica de Martini -porque hay una copa para cada ocasión-, hacen de él un cóctel muy elegante, sacado del mundo de la moda. Nació en el año 1984 y fue creado por Dick Bradsell en Londres, cuando una top model llegó a la barra para pedir una copa de algo que la despertara.

A pesar del nombre, no lleva Martini, solo se llama así por el tipo de copa en donde se sirve. Para elaborarlo se necesitan 45 mililitros de vodka, 22 mililitros de licor de café, 30 mililitros de café Espresso y hielo picado. Lo primero que debes hacer es preparar un café espresso al gusto y reservar. En la coctelera, coloca el hielo, el vodka, el licor de café y el café (no pasa nada si sigue caliente). Agita unos segundos para enfriar la bebida y, con un colador, sírvelo en una copa de Martini fría. Si quieres decorarlo de alguna forma, puedes añadir unos granos de café en la superficie, porque este es un cóctel para los amantes del café.

Moscow Mule

Este cóctel ya era famoso antes, pero desde que Bad Bunny sacó una canción con el mismo nombre, se ha vuelto incluso más popular. En realidad, no tiene nada que ver con Moscú y su origen tampoco es ruso, pero lleva este nombre porque uno de sus principales ingredientes es vodka. Nació en Nueva York en el hotel Chatham cuando unos amigos mezclaron sus combinaciones de cócteles favoritas y como resultado obtuvieron esta curiosa bebida.

Se sirve en una taza de cobre y los ingredientes que necesitas son: 40 mililitros de vodka, 20 mililitros de zumo de lima recién exprimido, cerveza de jengibre, una rodaja de lima para decorar y cubitos de hielo. Lo primero que debes hacer es poner una cucharada de hielos en la taza de cobre y añadir el vodka y el zumo de lima. Por último, debes echar la cerveza de jengibre hasta rellenar lo que queda de la taza y colocar la rodaja de lima como decoración, ¡ya estaría!

Atrévete de hacer estos cócteles para sorprender a tus invitados en tu próxima fiesta y disfrutar de las bebidas más refrescantes junto a tus comidas favoritas.