Si te gusta el salmón, y no tienes tiempo para cocinar, esta receta es perfecta para ti

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El salmón es uno de los pescados más completos que se pueden incorporar a la dieta. Rico en omega-3, favorece la salud cardiovascular, fortalece la memoria y aporta proteínas de alta calidad. Su versatilidad lo convierte en una opción ideal para cualquier comida, pero prepararlo de forma rápida y sin que quede seco puede ser un reto.

Afortunadamente, la experta en cocina Myo Quinn, ha compartido en 'Simply Recipes' un truco que ha perfeccionado durante más de 20 años para lograr un salmón jugoso, lleno de sabor y sin complicaciones. Su ingrediente secreto no es la mantequilla ni el aceite de oliva, sino el miso, un condimento japonés elaborado a base de soja fermentada que transforma por completo la textura del pescado.

El miso, además de ser conocido por su uso en sopas, tiene un perfil de sabor salado, ligeramente dulce y umami, lo que potencia el gusto natural del salmón sin enmascararlo. Quinn recomienda usar miso blanco, ya que es más suave y equilibra mejor los sabores. La clave está en mezclarlo con un poco de agua o caldo hasta obtener una pasta ligera y aplicarlo sobre el salmón antes de cocinarlo.

Este simple truco no solo evita que el pescado se seque, sino que también le da una capa extra de profundidad y jugosidad en cada bocado. Además, el miso es un alimento fermentado que favorece la salud digestiva, ayudando a equilibrar la microbiota intestinal y mejorando la digestión.

Para aplicar este método en casa, basta con precalentar el horno a 200 °C o calentar una sartén a fuego medio. Mientras tanto, se debe mezclar una cucharada de miso blanco con una de agua o caldo hasta obtener una textura suave. A continuación, se cubren los lomos de salmón con esta mezcla y se dejan reposar unos minutos para que el sabor se adhiera bien. Luego, se hornea durante 12-15 minutos o se cocina en la sartén durante tres o cuatro minutos por cada lado hasta que el salmón esté dorado por fuera pero jugoso por dentro.

El resultado es un plato lleno de matices, fácil de preparar y perfecto para quienes no tienen tiempo de cocinar pero quieren disfrutar de una comida saludable. Esta técnica, que ha convertido el salmón en la cena favorita de Quinn, permite transformar un plato cotidiano en una opción gourmet sin esfuerzo. Servido con arroz, verduras al vapor o una ensalada fresca, este salmón con miso se convierte en una receta equilibrada y deliciosa.