Han pasado cuatro años sin que la infanta Cristina haya pisado oficialmente el Palacio Real. Su última vez fue el 20 de junio de 2013, cuando junto al resto de la familia real asistió a la misa con motivo del centenario del nacimiento de don Juan, conde de Barcelona. La exduquesa de Palma ha vuelto a cruzar el patio de la armería, ha subido la escalera principal y se ha dirigido hasta la capilla de palacio para estar presente en el funeral celebrado en memoria de la infanta Alicia de Borbón-Parma, quien falleció el pasado 28 de marzo a los 99 años de edad.
Esta era una ocasión especial, pues ha sido la primera vez que la infanta Cristina ha coincidido en público con Felipe VI después de la sentencia del caso Nóos. Fue el pasado 17 de febrero cuando la hija de los Reyes eméritos fue absuelta de cualquier delito judicial, aunque su marido, que ha preferido quedarse en Ginebra junto a sus cuatro hijos, fue condenado a seis años y tres meses de cárcel por prevaricación, fraude y dos delitos fiscales. Para muchos, la presencia de la infanta en el Palacio Real simboliza un paso más hacia su rehabilitación en la familia real.
