Este miércoles por la mañana se anunciaba que el príncipe Henrik de Dinamarca había muerto la noche anterior en el palacio de Fredensborg. A sus 83 años, el marido de Margarita fallecía a causa de una neumonía agravada por un tumor benigno en el pulmón. Hasta el lugar de su defunción se acercaron ciudadanos daneses para depositar flores en honor al príncipe.
Desde bien entrada la mañana, las banderas de los palacios pertenecientes a la familia real ondeaban a media hasta, desde Fredensborg -lugar en el que falleció Henrik- hasta Amalienborg -su residencia en Copenhague- o Marselisborg -el palacete que tienen en Aarhus-. Asimismo, eso también sucedió en los turísticos jardines del Tívoli.
La hoja de ruta
Horas después de la muerte del príncipe Henrik de Dinamarca, la Casa Real ha publicado la hoja de ruta que se va a seguir en estos días venideros. Lo primero que se ha confirmado es que se ha declarado luto oficial hasta el 14 de marzo en la corte, por lo que los miembros de la familia no participarán en eventos sociales durante este mes.
El jueves, el cuerpo de Henrik fue trasladado desde el palacio de Fredensborg -lugar en el que falleció- al palacio de Amalienborg -residencia oficial de la reina Margarita en Copenhague-. Fue el viernes cuando sus restos fueron llevados a la iglesia de Christiansborg para dar comienzo la capilla ardiente.
El funeral de Henrik se celebrará el martes 20 de febrero de forma privada por deseo expreso del propio príncipe, quien no quiso que su muerte se convirtiera en un asunto de Estado. Asimismo, tan solo asistirán familiares y amigos cercanos. La ceremonia tendrá lugar a las 11:00 horas de la mañana en la iglesia del palacio de Christansborg, en Copenhague y será oficiada por el obispo Erik Norman Svendsen. El deseo del príncipe era ser incinerado y que sus cenizas se dividan: una mitad se esparcirá en el mar de Dinamarca y otra será enterrada en los jardines del palacio de Fredensborg.
