Ha sido, sin duda, una de las fiestas más sonadas de los últimos tiempos. Y se ha celebrado nada menos que en la casa donde Alfred Hitchcock rodó 'Atrapar a un ladrón'.
La Fiesta Secreta de Chopard era como su propio nombre indica, secreta, y solo se podía llegar a ella con los coches proporcionados por la exclusiva firma de joyería.
Primero hubo un gran desfile de modelos con joyas de la colección Red Carpet, en una pasarela sobre una infinity pool por la que pasaron, entre otras, la rusa Irina Shayk, quien tras su pasado noviazgo con Cristiano Ronaldo, es ahora una feliz madre de familia con uno de los hombres más deseados del mundo, Bradley Cooper, padre de su hija Lea, que nació el 21 de abril del año pasado.
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También desfilaron antes de la fiesta Joan Smalls, Sara Sampaio, Ming Xi y Jasmine Tookes, con vestidos de Elie Saab y, por supuesto, con joyas de la firma.
Una de las grandes sorpresas de la noche fue la actuación de Enrique Iglesias y uno de los modelos más comentados el de Kendall Jenner, que se saltó por completo el dress code y fue la que más enseñó...