'Daddy Cool' es algo más que un hit de los años 70 del siglo pasado. Los padres contemporáneos más famosos también tienen algo propio de aquella canción. En concreto, estilos personalísimos que forman parte de la herencia estética que han sabido inculcar a su prole. Si de la estética noventera del Príncipe de Bel-Air que encarnó Will Smith ya no queda nada, cabría preguntarse por qué su hijo Jaden ha hecho de la suya una imagen transgresora. Hasta tal punto que ha llegado a formar parte de la nómina de rostros conocidos que han protagonizado una acción publicitaria para la maison francesa Louis Vuitton. O como sucede en la estirpe de los Law. Una saga donde padre e hijo orbitan entre los mundos de la interpretación, la moda y la publicidad; el padre siendo imagen de la colección primavera-verano 2017 de la firma italiana Prada y el hijo protagonizando portadas de revistas de moda masculina. Mención aparte merecen, por ejemplo, David Beckham y su prole. Cuyos destinos, más allá del mundo del deporte, transitan ya en contratos suculentos para poner nombre y apellidos a campañas de firmas como Burberry -en el caso de Romeo-, Pull&Bear -para el primogénito Brooklyn- o H&M, en el caso del cabeza de familia. Y eso no es todo. El mejor regalo que pueden hacerse estos padres e hijos es la posibilidad de compartir algo más que la ropa: el estilo. A continuación, repasamos qué prendas podrían intercambiarse entre sí siendo fieles a su estética.
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