Tamara Falcó se queda sin novio

Un grupo de gaiteros escoceses jaleó a Tamara Falcó en su debut como diseñadora de gabardinas. El único ausense fue su novio, Marco Noyer. La hija de Isabel Preysler está un poco triste. Su corazón está partio. Noyer, su pareja desde hace más de un año, se ha ido a vivir a París.

El joven, de origen francés, acaba de partir hacia la capital del Sena para estudiar durante un año. Tamara se lo toma con resignación. La hija del Marqués de Griñón comenta que “ lo he tenido durante un año, nos veremos después de fiestas ya que estos días estaré con mis hermanos, Chabeli y Julio José, que están en Madrid”.

Dicen que Tamara es una alumna aventajada de su madre. No se sabe si ha tomado clases de dicción, pero habla más despacio y respirando mejor. En su primer acto como imagen de la firma escocesa ‘Barbour’ contestó con soltura y sin aturullarse. Y es que es una digna heredera de sus padres. “Tengo un 50% de cada uno”, confesó.

Tamara tuvo la feliz visita durante su puesta de largo como diseñadora de su padre. Carlos Falcó se mantuvo al margen de la sesión de fotos y las entrevistas, que durante casi cuatro horas mantuvieron al pie del cañón a su hija. Sólo cuando Tamara pudo respirar tranquila su padre se acercó para darle un beso y felicitarla. Fue entonces el momento para comentar: “Mi hija tiene la frescura y la naturalidad de la juventud y estoy encantado con ella”. “Como la lechuga, la palabrota preferida de la joven”, dijo alguien surgido de la nada.

La presencia de Tamara en la calle Jorge Juan colapsó la circulación de la capital. Infinidad de prensa, curiosos e invitados querían ver a la hija de la Preysler en su actuación en solitario y combatir el frío una buena copa de whisky. Tamara no bebió.