Alejandro Sanz: “No me caso... por ahora”

Alejandro Sanz no pasará por el altar de momento. El cantante, tras varios desengaños amorosos, no está pensando pedir en matrimonio a su actual novia, Raquel Pereda. Así lo han confirmado ante los insistentes rumores. Aunque la pareja no se separa ni a sol ni a sombra, parece que la boda todavía queda lejos pese a que atraviesan un buen momento sentimental. Ya están olvidados los problemas de salud que le obligaron a cancelar algunos conciertos. De hecho, triunfa incluso en el Madison Square Garden con sus melódicos temas.

Sanz y Pereda iniciaron su relación hace casi un par de años. Raquel era la antigua asistente del cantante, pero como el roce hace el cariño la pareja comenzó a verse con otros ojos. Y así hasta ahora. De hecho, pasaron unos días de vacaciones en Navidad en Extremadura. Posteriormente regresaron a Miami, donde tienen fijada su residencia oficial.

La vida sentimental de Alejandro Sanz ha sido como una auténtica montaña rusa. Aunque tuvo una breve relación con Alba Molina, la hija de Lole y Manuel, en sus inicios, dos han sido las mujeres que han marcado su vida: Jaydy y Valeria. Con la primera vivió una intensa historia de amor que acabó en fracaso. Se casaron en 1999 en Bali en una ceremonia sin validez legal. Poco después vino al mundo su hija Manuela. Aunque sus agendas profesionales les obligaron a pasar largas temporadas separados, su matrimonio duró hasta 2004, cuando confirmaron su ruptura.

Por aquel entonces su relación estaba rota y Sanz, como posteriormente se sabría, había tenido un desliz con Valeria Rivera. La joven, de origen puertorriqueño, entabló amistad con el cantante por motivos laborales, ya que trabajaba como estilista. De aquellos amoríos nació un niño, Alexander, oculto hasta que cumplió tres años. Valeria y Sanz no prosperaron como pareja, pero conservan una bonita amistad por su pequeño, que visita con cierta frecuencia a su padre en Miami.

Problemas judiciales

Pero si el amor le sonríe, los problemas judiciales son otra constante en su vida. El juez encargado del caso de presunta extorsión a Sanz por parte de dos ex empleados ordenó hace unos días el arresto de los acusados por estar fuera de la sala de audiencias cuando se les llamó a declarar. El magistrado Israel Reyes, que es el tercero que se ocupa del caso, mantuvo esposados durante más de media hora a Carlos González, ex mayordomo del artista, y a su esposa Sylvia Helena Alzate, al tiempo que amonestó al abogado de la pareja por estar ausente cuando sus defendidos fueron llamados a declarar.

Ambos trabajaron para el artista español en su residencia de Miami Beach y están acusados de un delito extorsión por presuntamente exigir 500.000 dólares a Sanz para no hacer públicos asuntos personales del intérprete madrileño. Mientras, Sanz sigue triunfando con su música. El pasado fin de semana ofreció un concierto en el Madison Square Garden de Nueva York, donde tuvo un gran éxito. De hecho, Marc Anthony, el marido de Jennifer López, se subió al escenario para compartir alguno de sus temas.