El debut de Katie Holmes en Broadway se salda con un rotundo fracaso

¿Le ha sentado mal el matrimonio? ¿La boda con Tom Cruise la ha convertido en un personaje controvertido? Puede que Katie Holmes se haya pasado los últimos días haciéndose estas preguntas y otras parecidas. Su debut en Broadway se ha saldado con un rotundo fracaso en las taquillas, que no han podido rentabilizar el negocio que alguien tan famoso como Holmes debería haber generado.  

La esposa del cienciólogo debutó hace algún tiempo en la meca del teatro estadounidense con All my sons, una obra en la que comparte cartel con Patrick Wilson, y según con una fuente perteneciente al equipo citada por la página web MSNBC, los resultados en la taquilla han estado “definitivamente muy lejos de lo que esperaban los productores”.

 

Las celebrities de Hollywood que dan el salto a Broadway suelen tener éxito en sus aventuras, pero con Katie no ha sido así, y “tampoco se puede decir que sea por la economía”, de acuerdo con la fuente consultada por MSNBC, “porque hay shows como Mamma Mia que venden todas las entradas”.

Katie puede estar segura de que su trabajo no ha sido la causa del bluff: “No es que Holmes lo haga mal, es lo suficientemente buena”, pero el recuerdo que su personaje en la serie Dawson Crece dejó en la audiencia puede haberla afectado negativamente. Eso o que el mal fario que parece perseguir últimamente a su marido, con graves problemas en su productora, se le haya contagiado. Ya les avisaron el día de la boda: “En lo bueno y en lo malo...”