La visita de Alfonso Díez a la duquesa

La duquesa ya no puede más de incomprensión filial. Y así lo ha declarado por activa y pasiva en público y en privado. La última movida tiene que ver con la supuesta filtración por parte de alguien muy cercano -se habla del duque de Huescar- del informe médico a la prensa. Cayetana, dolida, no entiende el porqué de esa reacción, pero sí tiene muy claro que nadie va a conseguir deprimirla.

Ella sigue con su historia de amor. Confía plenamente en su novio Alfonso Díez al que por supuesto va a prestar todo el apoyo que pueda. No sería extraño que la próxima entrevista que dé Cayetana no sea sola y sí en compañía del funcionario querido. A pesar de las ofertas económicas recibidas y de lo mucho que le han perseguido los reporteros para captar no solo imágenes sino declaraciones suyas, Díez ha dado siempre la callada por respuesta. Se trata de un pacto del que fuera el entrañable amigo que por el momento se mantiene en pie.

 

Desafiando a la familia, el novio está visitando a la duquesa en el palacio de Dueñas desde ayer. Aunque más incomodo para él, resulta mucho más favorable para los intereses afectivos de Cayetana. Entre otras cosas, porque en Sevilla la aristócrata tiene a sus amigos incondicionales que estarían dispuestos a arropar a la pareja por encima de todo. Una cosa es no estar de acuerdo con la historia sentimental y otra muy diferente dejar a la íntima tirada. Hay que tener en cuenta que la duquesa siempre ha apoyado incondicionalmente a todos los suyos.